El FBI está investigando el ataque del pasado viernes en la base naval de Pensacola (Florida) con la presunción de que se trató de un acto de terrorismo, según ha confirmado este domingo la agente encargada, Rachel Rojas, en conferencia de prensa. Justo antes del ataque, el autor del tiroteo, un militar saudí que se encontraba realizando un curso de formación en la base y que fue abatido tras matar a tres personas, había acusado en Twitter a Estados Unidos de ser antimusulmán y había criticado al país por apoyar a Israel, según los investigadores.
El asesino, identificado como Mohammed Ashamrani, era un teniente de la fuerza aérea saudí de 21 años. El FBI investiga si actuó solo o si formaba parte de una red. Las críticas a Estados Unidos en redes sociales que los investigadores atribuyen a Ashamrani son de una cuenta con un perfil de usuario similar al suyo. Los agentes creen que el asesino, que irrumpió a tiros en un edificio de aulas de formación de la base militar, viajó días antes del ataque a Nueva York, donde visitó el Rockefeller Center, y tratan de determinar el propósito del viaje, según ha declarado un oficial a Associated Press.
El asesino había empezado un curso de formación de tres años en agosto de 2017. Era uno de los 852 ciudadanos saudíes que entrenan en Estados Unidos bajo un acuerdo de cooperación del Pentágono con Riad.
“Como hacemos en muchas investigaciones de tiroteos, estamos trabajando con la presunción de que fue un acto de terrorismo”, ha dicho la agente Rojas. “El Gobierno saudí ha prometido cooperar totalmente con nuestra investigación”.
Días antes del ataque, Ashamrani había celebrado una cena donde estuvo viendo, con tres invitados, vídeos de tiroteos masivos, según informó Associated Press. Uno de los tres invitados a la cena, de acuerdo a la misma agencia, grabó un vídeo en el exterior del edificio mientras Ashamrani disparaba en el interior.
Las autoridades han identificado a los tres fallecidos como Joshua Kaleb Watson, de 23 años; Mohammed Sameh Haitham, de 19, y Cameron Scott Walters, de 21. Otras 10 personas resultaron heridas, entre ellas dos ayudantes del sheriff, uno de los cuales fue el que abatió a Ashamrani.
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