Intensidad. Eso es lo que ha pedido Aíto García Reneses en las últimas semanas a sus jugadores y probablemente esa sea una de las palabras más repetidas por el técnico del Bàsquet Girona. El equipo encadena tres derrotas consecutivas y ha pasado de mirar los puestos de playoff a contar el ‘average’ con el Baxi Manresa, su próximo rival (sábado, 18 horas), al que le sonsaca tres victorias, pero con el que perdió el partido de ida (82-79).
“Creo que el Básquet Girona debe aspirar a tener un buen nivel de juego, y eso es complicado de poner en la clasificación”, indicaba el entrenador al ser preguntado por los objetivos del equipo. Sea como fuere, el conjunto gerundense recibe a un Manresa en plena fase de ascenso tras clasificarse para cuartos de la Champions y salir de la zona de descenso de la liga con las victorias ante Fuenlabrada y Betis con un estelar Jerrick Harding (41 puntos contra los andaluces). Un Baxi que se ha reconstruido tras nueve bajas de jugadores a lo largo de la temporada y que parece cada vez más asentado en su juego.
En la otra cara de la moneda, el Girona buscará recuperar su mejor versión. Uno de los bases del conjunto, Pol Figueras, ha añadido que los jugadores tienen sed de reivindicarse, hecho que pasa por una condición sine qua non: ser intensos en ambos lados de la pista. “Debemos recuperar el baloncesto de antes del parón FIBA y mañana es un día perfecto para que el pabellón esté lleno y nos ayude a sacar el partido adelante, para ello debemos ser intensos los 40 minutos”, ha indicado el jugador.
A falta de 11 partidos para la conclusión de la fase regular, una de las asignaturas pendientes del conjunto presidido por Marc Gasol es, sin duda, mejorar el tiro exterior. El Bàsquet Girona es el peor equipo de la liga en ese aspecto con un 30,8% de acierto en triples y una media de 6,8 triples convertidos de 22 intentos. En las tres derrotas encadenadas, el conjunto de Aíto anotó 3 triples en Bilbao, 7 ante el Valencia y 4 ante Unicaja. Por contra, el conjunto catalán ocupa la segunda posición de la liga en cuanto a recuperaciones, con una media de 11 por encuentro.