El Gobierno prevé mantener la revalorización de las pensiones el año que viene. Según confirman fuentes gubernamentales, el Ejecutivo ha decidido incrementarlas un 0,9% en 2021, la misma subida aplicada en 2020. Esta disposición será previsiblemente recogida en el Plan Presupuestario de 2021 que se remitirá este jueves a Bruselas. Lo que todavía no está claro es si habrá también un incremento del sueldo de los funcionarios, un asunto que se ha convertido en un punto de debate entre los socios de Gobierno tras barajar congelarlo el pasado septiembre ante el nefasto impacto de la pandemia y una inflación en mínimos.
En cuanto a la revalorización de las pensiones, la misma ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ya aseguró hace unos días que el Ejecutivo estaba comprometido con la actualización de las pensiones al IPC (índice de precios al consumo) para garantizar el poder adquisitivo del colectivo. El dato que está usando ahora el Gobierno es el deflactor del PIB, que es del 0,9% para el próximo año.
No obstante, este incremento de las pensiones deberá ser negociado por el Gobierno con los distintos partidos y los agentes sociales.
El Gobierno de coalición ya había subido el pasado febrero las pensiones en un 0,9%, la misma cifra que se plantea para el año que viene. Este incremento, con carácter retroactivo desde el 1 de enero, fue apoyado en el Congreso por la mayoría de los partidos y era una medida a la que se había comprometido el ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, en su toma de posesión. El alza implicó un coste de unos 1.406 millones de euros.
Además, el que viene sería el cuarto año consecutivo en el que las pensiones subirán por encima del mínimo legal previsto en el índice de revalorización de las pensiones (0,25%), que se aplicó durante cinco ejercicios y que aún no se ha derogado a la espera de los acuerdos del Pacto de Toledo. En 2019 las pensiones se incrementaron un 1,6% con carácter general.
Sueldo de los funcionarios
Lo que sigue en el aire es una posible subida del sueldo de los funcionarios. La ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, dijo que el indicador del deflactor del PIB se tendría en cuenta para señalar el “importante compromiso” con el mantenimiento de la capacidad adquisitiva de las pensiones y el sueldo de los funcionarios.
El Ejecutivo de coalición había aprobado a finales del pasado enero una incremento del sueldo de los funcionarios del 2% para 2020, por un coste total de 3.212 millones de euros. Esta subida, en realidad, ya había sido acordada entre el anterior Gobierno del PP de Mariano Rajoy y los principales sindicatos (CC OO, CSI-F y UGT) en marzo de 2018 para un periodo de tres años. El pacto fijaba un aumento fijo del 1,75% en 2018 (más un 0,2% por los fondos adicionales previstos); otra alza del 2,25% para el año siguiente, que alcanzó el 2,5% por variables como la evolución del PIB, y del 2% para este año. Pero ese acuerdo trienal ya ha vencido y no se asegura la revalorización del sueldo de los funcionarios.
En septiembre, el Gobierno estaba estudiando congelar el sueldo de los funcionarios ante la situación de crisis económica a la que ha llevado la pandemia y la baja inflación ―el IPC se situó en el -0,4% el mes pasado, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística―. Este ha sido uno de los puntos de debate entre los dos socios de Gobierno, PSOE y Unidas Podemos. La formación morada se enrocó y puso como línea roja que se aprobara la revalorización de los salarios de los funcionarios públicos para 2021. Fuentes gubernamentales aseguran que de momento no hay nada cerrado.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha reclamado este jueves una reunión urgente para abordar las retribuciones de los funcionarios de cara a 2021. El sindicato recuerda que los trabajadores públicos arrastran una pérdida del poder adquisitivo de entre el 12,9% y el 17,9% en la última década y pide un acuerdo a varios años que contemple una recuperación progresiva de la estructura salarial previa a 2010.
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