El Gobierno ha decidido denunciar ante la Fiscalía los vínculos de Javier Tebas, presidente de LaLiga, con el Fuenlabrada. Según fuentes del Ejecutivo, este ha solicitado que se investigue la oferta de 130.000 euros por trabajos de asesoría legal al club madrileño que le presentó en 2018 el bufete de Tebas. El Ministerio de Cultura y Deporte ha dado este paso al comprobar que LaLiga y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) han llevado este asunto “a una vía muerta”, según precisan estas mismas fuentes. El Consejo Superior de Deportes, que dirige la secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano, informó al ministerio de Cultura y Deportes y al de Justicia de estas posibles irregularidades. El viernes, el ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, dio instrucción a la secretaria de Estado para que procediera a llevar a la Fiscalía esta información para que pueda aclararla. El texto, en el que se detallan los hechos para que se investigue, ha sido registrado este lunes por la mañana.
En el momento de hacer ese presupuesto, Tebas ya era presidente de LaLiga, un cargo que ocupa desde 2013. La vinculación, adelantada por eldiario.es, demostraba las conexiones de la patronal del fútbol con el club madrileño, cuyo secretario del consejo es el hijo de Tebas. No obstante, en el momento de la oferta de asesoramiento en 2018, el Fuenlabrada militaba en Segunda B, categoría no profesional que está fuera del radar de LaLiga. Tras el ascenso del equipo a Segunda (que sí está bajo el amparo de la patronal), en concreto el 21 de julio de 2019, según LaLiga, Tebas informó a su directiva de que su hijo pertenecía al Consejo de Administración del Fuenlabrada y decidió inhibirse de cualquier asunto referido a este club. El conjunto madrileño ha estado en la diana este verano a raíz del episodio surgido tras el aplazamiento del Deportivo-Fuenlabrada por los casos positivos de covid-19 en el club madrileño antes de viajar a Riazor en la última jornada de Segunda División. Durante el conflicto, Tebas padre delegó en su vicepresidente cualquier decisión al respecto.
El Gobierno, según estas fuentes, ha esperado un tiempo para ver cómo resolvía LaLiga y la federación este asunto. El Ejecutivo entendía que el comité de competición de la Federación tomaría decisiones importantes sobre el escándalo en el Fuenlabrada. Sin embargo, después de que este órgano hiciera una investigación, LaLiga alegó que el comité de competición no tenía competencias para tomar decisiones. Al entender que la RFEF estaba asumiendo este bloqueo y que el asunto iba a quedar en nada, el Gobierno ha decidido acudir a la Fiscalía para que se investigue el caso y no quede aparcado.
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