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El Leicester no puede con el Brighton y pierde comba


El Leicester City (3º) de Brendan Rodgers, en plena lucha por la segunda plaza de la Premier League, ahora en manos del Manchester City, volvió a ceder otros dos puntos al empatar ante el Brighton (0-0) de Graham Potter. En un partido plano y con pocas ocasiones claras, los foxes fueron incapaces de romper las redes de Mathew Ryan.



Los foxes llegaban con la imperiosa necesidad de sumar los tres puntos en el King Power Stadium, más después del ‘pinchazo’ en la última jornada ante el Watford (1-1
) donde sumaron un empate que les valió de poco en su carrera por atrapar al Manchester City de Guardiola, segundo clasificado de la Premier. El Brighton, en cambio, con la moral por las nubes al derrotar a todo un Arsenal por 2-1.

El encuentro comenzó de la peor forma posible para el Leicester. En una jugada aislada, el atacante del Brighton, Connolly, sacó petróleo y logró un penalti (11’) tras la pasividad de la defensa y el error infantil de James Justin, que derribó al delantero. Sin embargo, el devenir del partido, que parecía ir a favor de los visitantes no fue así. Kasper Schmeichel sacó a lucir sus reflejos y con un gran movimiento atajó el esférico en la pena máxima después del disparo del ‘7’, de Neal Maupay, que desaprovechó una ocasión de ‘oro’ para adelantar a los suyos.

La primera llegada del Leicester no llegó hasta el minuto 29’ en un remate manso de cabeza de Vardy, aunque la pelota la detuvo sin problemas Ryan. Los foxes tuvieron muchos problemas para generar espacios en una primera mitad marcada por el penalti no transformado del Brighton, aunque Söyüncü a punto estuvo en una carambola de jugada de marcar de cabeza en la ultima acción de los 45 primeros minutos.

En la reanudación, los foxes salieron con una marcha más para intentar dar un giro en el partido. En el 53’ el talentoso James Maddison, que en la primera mitad estuvo ausente, realizó su primer chut y por poco abrió el marcador.

No obstante, con el paso de los minutos a los de Rodgers le comenzaron a correrle las prisas a sabiendas de perder otros dos puntos con el empate. Pese a que tuvieron alguna ocasión en la segunda mitad, la realidad es que con más corazón que fútbol no fueron capaces de romper las redes del Brighton.


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