El que perdona, lo acaba pagando muy caro en esto del fútbol. En España, en la China y en Alemania. En la liga de este último país lo sufrió este domingo el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, que fue indulgente con el Borussia Dortmund y contra su voluntad acabó cosechando una derrota de esas que se califican como injustas por los méritos realizados. Pero la realidad es que en esto del balompié, justicia a parte, gana el que marca más goles que el rival, y mientras que el Dortmund hizo dos el Leverkusen no logró ninguno (0-2).
Con Florian Wirtz dejando su lesión definitivamente en el olvido y Exequiel Palacios y Amiri creando juego en la medular, el Bayer Leverkusen llevó la iniciativa en el juego desde el inicio, haciendo latente lo bien trabajando que tiene el equipo el bueno de Xabi Alonso, pero ni los mencionados ni sus compañeros de equipo fueron capaces de superar a un Kobel que supo mantener la portería del Dortmund a cero.
El que sí marcó fue Karim Adeyemi, que por fin se estrenó en esta Bundesliga. Fue en el 33′, al culminar con un disparo cruzado una buena jugada colectiva en la que intervinieron Bellingham y Haller, firmando éste último una asistencia sin tocar el balón.
Con ese 0-1 se llegó al descanso, y ya en la segunda mitad el Bayer Leverkusen metió una marcha extra en la búsqueda del empate. Y sí marcó gol uno de sus futbolistas, Tapsoba, pero lo hizo en propia puerta para establecer en el marcador el 0-2 en el minuto 53 de juego. Fue el último tanto que se vio en Leverkusen este domingo por la tarde en el que el Dortmund, con los 3 puntos logrados, se posicionó 4º en la Bundesliga a 3 del liderato del Bayern. El Leverkusen, por su parte, deambula por la zona media de la tabla. No es moco de pavo teniendo en cuenta la situación en la que estaba cuando Xabi Alonso se hizo cargo del equipo hace unos meses.