El Bayer Leverkusen dio un nuevo paso hacia la Champions tras imponerse este lunes por 2-0 al Eintracht, en una jornada de la Bundesliga en la que el Leipzig se complicó sus opciones de acceder al máximo torneo continental por la vía liguera al caer (3-1) en su visita al campo del Borussia Moenchengladbach.
Una clasificación que los de Domenico Tedesco tratarán de lograr ganando la Europa League para lo cual tendrán que sellar primero su pase a la gran final en el encuentro de vuelta de semifinales que le medirá el próximo jueves con el Rangers en Glasgow y al que los alemanes llegan con un tanto (1-0) de ventaja.
Compromiso que pareció pesar en la cabeza de los jugadores del Leipzig más que su encuentro con el Borussia Moenchengladbach, que castigó las numerosas desatenciones defensivas del conjunto visitante.
Si a los 17 minutos de juego el austríaco Konrad Laimer en su intento de cortar una jugada dejó el balón en los pies a Breel Embolo para que el delantero suizo firmase el 1-0, en la prolongación de la primera mitad la falta de contundencia del Leipzig permitió al internacional helvético dejar sólo ante el portero a su compañero Jonas Hofmann para establecer el 2-1.
Y eso que el preparador del Leipzig no dudó en sentar superada la media hora de juego al defensa croata Josko Gvardiol, al que el colegiado le había perdonado minutos antes la segunda cartulina amarilla, para tratar de reconducir la deriva defensiva de su equipo.
Pero ni así logró reaccionar el Leipzig que apenas logró hacer entrar en acción a la tripleta ofensiva que conformaron el español Dani Olmo, el francés Christopher Nkunku y el portugués André Silva.
De hecho, en la única opción en la que lograron asociarse Silva y Nkunku el Leipzig logró establecer a los 36 minutos el momentáneo 1-1, que hacía albergar nuevas esperanzas a los de Tedesco.
Una posibilidad de remontada que pareció acrecentarse en la segunda mitad con un remate al larguero de cabeza de André Silva y, sobre todo, con la expulsión del defensa local Nico Elvedi que vio la tarjeta roja directa a los 64 minutos al cortar en falta un peligroso contraataque conducido por Nkunku.
Sin embargo, cuando todo parecía más favorable para el Leipzig llegó el tercer y definitivo tanto (3-1) del Moenchegladbach en una acción en la que Hoffman encontró más facilidades de las debidas para maniobrar en el área.
Una derrota que dejó al Leipzig en la quinta posición con un punto menos que el Friburgo, el equipo que cierra las plazas de Liga de Campeones, y con sólo dos unidades de ventaja sobre un enrachado Colonia, que amenaza ya la posición de los de Domenico Tedesco.
Quien no falló fue el Bayer Leverkusen, que se afianzó en la tercera plaza de la clasificación, tras doblegar por 2-0 al Eintracht, en un choque en el que brilló con luz propio el atacante francés Moussa Diaby.
Si de todos es conocida la explosividad del internacional galo, este lunes Diaby dejó claro que no sólo posee un formidable punta de velocidad, sino que cuenta además con un indiscutible talento.
Tal y como dejó claro con los dos sensacionales pases de gol que firmó ante el Eintracht, en el primero de los cuales Diaby no dudó en emular al croata del Real Madrid, Luka Modric, con una espectacular asistencia con el exterior del pie. Un magnífico pase que dejó completamente solo a Paulinho para que el defensa brasileño estableciese a los 18 minutos de juego el 1-0.
Pero si en el primer tanto local Diaby demostró su calidad en el golpeo del balón, en el segundo el francés dejó claro su visión de juego con un sutil pase que el checo Patrick Schick sentenciase a los 51 minutos definitivamente el encuentro (2-0).
Y es que el Eintracht, con la mente ya puesta en el encuentro de las semifinales de la Europa League que le medirán el próximo jueves con el West Ham, como demostraron los hasta ocho cambios que introdujo el técnico Oliver Glasner en el once inicial, nunca pareció en disposición de discutir el triunfo al Leverkusen.