El fútbol es maravilloso. Que me perdonen los más acérrimos fans del Liverpool, porque desde luego que no les hará gracia leer esto a colación de que su equipo ha cosechado una derrota. Pero lo es porque suceden cosas como la acontecida este miércoles. Regresaban los de Klopp a jugar en Anfield después de que el pasado 21 de enero, la última vez que lo habían hecho, cayesen ante el Burnley poniendo fin a 68 partidos de Premier League actuando como locales sin perder. ¿Y qué pasó? Pues que lejos de comenzar una nueva racha, volvieron a verse superados en el marcador. También por 0-1 esta vez, con el Brighton de Graham Potter haciendo las veces de verdugo y siendo Alzate, ayudado por Trossard, el autor del único tanto del partido.
Para ser justos, cabe puntualizar que, a diferencia de lo sucedido frente al Burnley, esta vez no se puede hablar de milagro por el hecho de que el visitante saliera victorioso de Anfield. El Brighton ganó y lo hizo con total merecimiento tras un encuentro en el que, aunque con diferente estilo y sin necesitar el balón en demasía, miró a la cara y sin ningún tipo de complejo al Liverpool.
Sin embargo, la historia del partido pudo cambiar si Salah, habilitado por un pase largo de Henderson (esta vez central) y con apenas dos minutos de juego disputados, hubiese estado acertado para superar a Robert Sánchez en un mano a mano. No lo hizo, y como quien perdona generalmente lo acaba pagando, ‘Don Fútbol’ se lo apuntó para pasarle la cuenta más tarde.
Fue ya en la segunda mitad. Concretamente en el 56’, cuando en una jugada rarísima, entre Alzate y Trossard, como si de Oliver Atom y Tom Baker se tratase, firmaron un tiro combinado con carambola que encontró la red ante un superado Kelleher. El Liverpool había estado intentado desarbolar la defensa del Brighton de todas las formas habidas y por haber, y el rival hizo trizas la suya sin precisar de demasiada elaboración y con cierta fortuna de su lado. A partir de ahí y hasta el final, el partido por momentos se rompió, pero el 0-1 en el luminoso permaneció perenne hasta el pitido final.
(+) Mira el resumen del Liverpool – Brighton
No ha marcado todavía el Liverpool en Anfield en este 2021 y con esta derrota se le pone cuesta arriba lo de revalidar la Premier League. El Manchester City, con un partido jugado menos, ya le saca 7 puntos de ventaja. Si el próximo domingo, cuando los de Guardiola visitan Anfield, caen derrotados los de Klopp, el Liverpool quedará virtualmente descartado de la lucha por el título.
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