El Real Madrid y Zinedine Zidane están en vilo por Toni
Kroos y Fede
Valverde, dudas para la eliminatoria de cuartos de final contra el Liverpool y para el decisivo Clásico de Valdebebas tras caer lesionados contra el Celta de Vigo en la jornada previa al parón de selecciones. En el regreso al trabajo de la plantilla blanca ayer lunes, tanto el alemán como el uruguayo siguieron trabajando al margen de sus compañeros para intentar recuperarse lo antes posible de cara a la semana más importante de toda la temporada.
Kroos abandonó la concentración de Alemania tras pasar pruebas médicas con su selección por un problema en la cadera mientras que el uruguayo tiene problemas musculares en su pierna de derecha. Si no llegan a tiempo para recibir al Liverpool, Zinedine Zidane estará obligado a improvisar una solución de emergencia para repoblar su centro del campo. Los únicos jugadores sanos en la medular son Casemiro, Modric e Isco, aunque el malagueño está teniendo un papel muy discreto esta temporada.
El jugador alemán ha vuelto a subir el nivel esta temporada y, antes del último percance, estaba siendo uno de los futbolistas más importantes y decisivos del Real Madrid. Todo el juego del equipo de Zidane pasa por sus botas y su baja se antoja muy delicada si el Madrid no quiere verse sobrepasado por el alto ritmo de juego que intentará aplicar el Liverpool.El ex del Bayern, con siete asistencias y dos goles en su cuenta, suma 2.661 minutos jugados y es el sexto jugador de campo más empleado por Zidane solo por detrás de Varane, Mendy, Modric, Casemiro y Benzema La ausencia de Valverde, que está teniendo menos protagonismo que el curso anterior debido a sus constantes problemas físicos, también es muy problemática, ya que el uruguayo es uno de los jugadores más intensos y con más despliegue de toda la plantilla.
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