La historia se repitió y, como en 1998-99, el Manchester United le ganó este domingo una final al Newcastle. Hace 24 años fue la FA Cup (2-0) y en esta ocasión, la Carabao, que el equipo de Old Trafford se llevó con otro 2-0 en Wembley. El principio de una era: se trata del primer trofeo de Erik ten Hag como entrenador del United, que el pasado jueves eliminó al Barcelona en el playoff de la Europa League y en octavos se medirá al Betis.
El Newcastle ganó su último gran título en 1968-69, la Copa de Ferias, y, pese al gran proyecto construido esta temporada por Eddie Howe, a los ‘magpies’ les tocará seguir esperando. El 5º clasificado de la Premier no fue capaz de sorprender a su rival, de superar el dispositivo defensivo de un United que se convirtió en el sucesor del Liverpool, campeón de la Carabao Cup 2021-22. Para el equipo de Old Trafford, fue el primer título en seis años, desde la Carabao Cup y la Europa League ganadas con José Mourinho en su banquillo.
La alegría del Manchester United
Pese a que el Newcastle empezó bien el partido, lo cierto es que fue a menos a lo largo de la primera parte ante un Manchester United que no perdonó cuando tuvo la ocasión. Así, Casemiro avanzó a los ‘diablos rojos’ a balón de parado, de cabeza, aprovechando el balón que le envió Luke Shaw. Loris Karius encajaba así su primer gol en el que era su primer partido después de un año y diez meses. Era el minuto 33.
La sanción de Nick Pope y el hecho de que Martin Dubravka no pudiera ser alineado motivaron que Karius (marcado por sus errores en la final de Champions entre el Liverpool y el Real Madrid en 2018) fuera titular en el Newcastle, en el que no había debutado.
No tuvo tiempo de reaccionar el Newcastle y ya le marcó el segundo el United, en el que dio la impresión de que Karius pudo hacer algo más, aunque cumplió a lo largo del partido. Rashford disparó con la zurda, aunque el gol se le adjudicó a Sven Botman en propia puerta en el 39′. El central despistó al hoy portero titular del Newcastle.
Fueron dos duros golpes por parte de un United más contundente que su rival, que no pudo sacar partido de sus internadas. En la segunda parte, Allan Saint-Maximin se echó encima a su equipo, creando peligro con sus rápidas internadas. En el 68, Lisandro Martínez evitó que pudiera marcar Joelinton. Aunque la jugada fue invalidada, David de Gea impidió que Callum Wilson consiguiera el primer tanto del Newcastle. Los de Howe seguían luchando por la remontada, mientras que Karius salvó un disparo de Rashford con una buena intervención y en el último suspiro a Bruno Fernandes.