Dos derrotas en el Vélodrome en apenas cuatro días han acabado prácticamente con las esperanzas de la apasionada afición del Marsella de poner fin a una sequía de títulos que se prolonga desde que en 2012 celebró la conquista de la hoy desaparecida Copa de la Liga.
El aplastante 0-3 encajado el domingo ante el PSG evitó que el Marsella, segundo clasificado, se situara a dos puntos y quedara a ocho puntos del líder de la Ligue 1. Una derrota que dolió, pero entraba dentro de lo posible teniendo en cuenta que el rival cuenta en ataque con dos figuras mundiales como Leo Messi y Kylian Mbappé. Entre ambos fabricaron los tres goles: el argentino marcó uno y dio los otros dos a su compañero. El francés también le asistió a Leo en el suyo.
Una eliminación humillante
En cambio, la derrota del miércoles fue insospechada, humillante. El modesto Annecy, con el segundo presupuesto más bajo de la Ligue 2, accedió por primera vez en su historia a las semifinales de la Copa francesa tras eliminar a domicilio al Marsella por penaltis (2-2 y 6-7).
Una debacle imperdonable ya que el equipo de Igor Tudor se había convertido en el claro favorito del torneo tras eliminar al PSG en la ronda anterior de octavos (2-1).
“Es enormemente decepcionante, muy triste”, reconoció Tudor. “Hemos quedado fuera de una competición en la que eliminamos al PSG y al Rennes, es una locura”. El Rennes, quinto en la Ligue 1, cayó en 1/16 de final en el Vélodrome por 1-0
Guendouzi habla de “mala conducta profesional”
Mattéo Guendouzi, medio del Marsella, incluso calificó la actuación de “mala conducta profesional” y admitió que no había excusas. “Hay más que decepción, hay enojo. Habrá que afrontarlo”.
Hace apenas una semana el Marsella estaba lanzado tras haber cosechado una sola derrota en 14 partidos de Ligue 1 y Copa e ilusionó a su afición con volver a derrotar al PSG.
El demoledor 0-3 deja al único francés en ganar la Champions League, en 1993, ante la perspectiva de quedarse una temporada más sin ganar la Ligue 1, título que ganó nueve veces pero se le resiste desde 2010. Mientras, la última de sus diez Copas se remonta a 1989. En Europa quedó último en la fase de grupos de la Champions por detrás de Tottenham, Eintracht y Sporting de Portufgal.
El subcampeonato, objetivo más trealista
A trece jornadas del final, el objetivo más realista que le queda al Marsella es mantener el segundo lugar y lograr la clasificación automática para la Champions League 2023-24. Saca dos puntos a Lens y Mónaco, seis al Rennes, al que visitará el domingo en un partido clave para poner fin a una semana dura y recuperar sensaciones.