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El más grande dentro y fuera de la pista

El más grande dentro y fuera de la pista

Si hay una palabra que define a la perfección la carrera de LeBron James es regularidad. Solamente así se puede explicar que se haya convertido en el máximo anotador de todos los tiempos en la NBA o que tenga tantísimos récords en su posesión. 

Pero quizás hay otro factor en la vida de LeBron en la que la regularidad sea, como mínimo, tan destacable como la lograda en la pista de baloncesto. ‘El Rey’ ha logrado compaginar su vida de superestrella de la NBA con una vida personal absolutamente impoluta. 

Draymond Green, su némesis en la histórica rivalidad entre Warriors y Cavaliers, explicó mejor que nadie los motivos que hacen aún más grande si cabe a LeBron James. “Es la mejor cara que la NBA ha tenido. Vivimos en una era llena de cámaras y redes sociales y nunca ha protagonizado un escándalo. Nunca ha sido arrestado ni fotografiado estando borracho. Esas cosas van de la mano de su longevidad y consistencia. Es la mejor prueba de la disciplina que tiene en su vida y el baloncesto es el resultado de ello. Habla perfectamente del tipo de persona que es y el baloncesto se ha beneficiado de ello”.

El niño de Akron

La vida de LeBron James ha estado siempre marcada por las altísimas expectativas que había en él. ‘El elegido’ era para muchos el heredero de Michael Jordan, y LeBron James respondió a lo que se esperaba de él de inmediato, tardando muy poco en ser el mejor jugador de la liga y manteniendo ese estatus hasta día de hoy, 20 años después.

A pesar de eso, a LeBron nunca se le subió la fama a la cabeza y siempre se consideró “un niño de Akron, Ohio”. Usando su fama, dinero y poder, LeBron siempre ha tratado de aportar a la sociedad y transformar su alrededor. Probablemente, su iniciativa solidaria más importante sea “I promise”, con la que ayudó a la escolarización de los niños más desfavorecidos de su ciudad natal. 

Las acciones solidarias de LeBron no se quedan aquí, ya que a lo largo de los años ha ido realizando varias donaciones desinteresadas. Su decisión de firmar por los Miami Heat en 2010 fue uno de los grandes eventos televisivos del año y no dudó en sacarle partido, llegando a donar más de cinco millones de dólares provenientes de ese gran momento para la NBA a varias entidades benéficas.  

Su historial filántropo no se queda aquí, ya que a través de su LeBron James Foundation se estima que ha hecho donaciones por más de 100 millones de dólares, como los 2,5 millones de dólares entregados al Smithsonian’s National Museum Of African American History And Culture para ayudar a una exposición sobre Muhammad Ali, uno de sus ídolos.

Si algo tienen el legendario boxeador y LeBron James es su incansable activismo por los derechos de los afroamericanos en los Estados Unidos. James no ha dudado en hablar ante las injusticias que vive la comunidad negra en su país, siendo cabeza visible de varios movimientos en su favor. 




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