En OAKA, ante Panathinaikos, se quedó rozando el triple-doble y el sábado contra la Penya acabó como máximo anotador con 19 puntos y un 80% en tiros de campo. Satoransky lleva un acumulado de 6 de 12 triples en los últimos cuatro partidos y eso no le ha impedido destacar también en asistencias.
Está claro, pues, que gran parte de la creación ofensiva del Barça pasa por sus manos en este momento de la temporada, uno de los más brillantes del equipo azulgrana.
“Estamos en un gran momento pero también mejorando”, dijo el base checo tras el trabajado pero brillante triunfo en Grecia.
Su retorno al Barça tras seis temporadas en la NBA despertó expectación e ilusiones pero el reto para ‘Sato’ no era fácil. Se trataba de cubrir la baja de un Nick Calathes consolidado como uno de los mejores directores de juego de Europa, además con el lógico período de readaptación al basket europeo al que llegaba en una era distinta.
Al final, las prestaciones de Satoransky están mejorando claramente las de su predecesor y, en algunos conceptos, también la versión de sí mismo que pudo verse en la etapa anterior.
En conceptos por 40 minutos, el checo anota más, es mejor en rebote, en robos e incluso asiste más que Calathes por 40 minutos esta temporada. Ni que decir tiene que sus porcentajes de acierto mejoran notablemente los del griego, en especial en triples, donde está firmando su mejor campaña en su carrera con un 46% en el acumulado de todas las competiciones.
“Ojalá no pare porque está en buena línea. Está más cómodo dentro del sistema, dentro del equipo y en el basket europeo. Es muy importante para nosotros”, dijo el técnico Jasikevicius tras la victoria sobre el Joventut.
Cuando le recuperó este verano, el Barça sabía que no se hacía con un anotador especialista sino con un jugador con gran capacidad física capaz de aportar en diversos conceptos y aprovechar sus centímetros ante los defensores rivales. Su mejora esta campaña le ha permitido erigirse en una opción fiable en el tiro a distancia, lo que da más mérito a su evolución.
Una de las claves puede ser la sintonía que ha encontrado con el técnico.
“A veces me vuelvo un poco loco y necesitaba el tipo de emociones que él me aporta”, dijo recientemente Satoransky en una entrevista para ‘Basketnews.com’. “Después de seis años en la NBA estaba buscando un entrenador que me diera impulso dentro y fuera de la pista. Me está exigiendo para ser un líder y mostrándome que no puedo huir de esa responsabilidad”, agregó.
Satoransky venía de trabajar con Xavi Pascual en su anterior etapa y en estas declaraciones comparaba a ambos técnicos: “Tienen muchas cosas en común, una preparación similar de los partidos, muy orientada a detalles, con muchos sistemas aunque quizá Xavi tenía más. Saras nos deja algo más de libertad en ese sentido”.
Si la mejora de Satoransky dará para cerrar la temporada con éxito es algo que queda por ver. Por de pronto, sus prestaciones evidencian acierto en la apuesta y auguran un futuro inmediato brillante. Su actual compromiso con el Barça es hasta 2026.