El Atlético de Madrid planea un verano relativamente tranquilo en lo que a movimientos en la plantilla se refiere. El club rojiblanco apostará por la continuidad, como ya manifestó públicamente su presidente, Enrique Cerezo, hace unos días. Una buena noticia para el campeón de Liga, que a diferencia de 2014, la penúltima vez que conquistó el torneo, no sufrirá la pérdida de jugadores importantes.
El bloque está formado y sólo necesita unos retoques (portero suplente, un lateral, un centrocampista, que será Rodrigo de Paul
y un delantero). Eso, sí no se produce ninguna salida relevante, más allá de los futbolistas que están en el mercado, como Vitolo. El caso es que se espera un mercado austero en el Metropolitano, donde cifran las pérdidas económicas producidas por la pandemia en unos 90 millones de euros, y donde este viernes se debe aprobar una ampliación de capital en la junta de accionistas que ayude a reducir la deuda y aumentar la liquidez para mantener el nivel competitivo de la plantilla.
Sin embargo, el desembolso no será muy diferente a la anteriores pretemporadas. Lo que se ingrese será lo que se gaste. Mucho se habla en cada verano del ‘gasto en fichajes’ de los clubes, estando el Atlético de Madrid habitualmente en lo más alto de estas listas en las que, por algún u otro motivo, se obvian los ingresos por traspasos. Es decir, el balance. Y es que repasando lo datos desde que Diego Simeone es entrenador del conjunto colchonero, encontramos que el Atlético no es, ni de lejos, de las entidades que más gastan en los mercados.
Tomando como referencia la campaña 12/13, la primera en la que el Cholo estuvo desde el inicio en el banquillo rojiblanco (la primera en la que tuvo algo que decir en la confección del plantel), el Atlético ha tenido un total de 190 altas y 183 bajas. Siempre según datos de Transfermarkt, web especializada en el sector, el club madrileño ha gastado un total de 980’15 millones de euros y ha ingresado 930’95. Es decir, el gasto real es de sólo 49’2 ‘kilos’ en nueve temporadas.
UNA COMPARACIÓN ESCLARECEDORA
Para entender mejor lo que esto supone, qué mejor que compararlo con el resto de clubes. El Atlético es el octavo club del mundo que más ha gastado en ese periodo de tiempo, sólo superado por Manchester City, Barcelona, Chelsea, Juventus, Manchester, PSG y Real Madrid. Pero es que en el ránking de ingresos, es quinto. Sólo Benfica, Chelsea, Juventus y Mónaco han recibido más dinero por traspasos que los colchoneros.
Y en cuanto al balance entre gastos e ingresos, hay que pasar muchas entidades para encontrar al Atlético. Concretamente 70, pues los madrileños están en el puesto número 71 de clubes que más dinero han gastado desde el verano de 2012 hasta el de 2020. Es decir, que hay 70 equipos que han realizado en este tiempo más desembolso que el rojiblanco con, recordemos, 49’2 millones. Entre ellos, el Al-Hilal Riyadh de Arabia Saudí (posición 67, con 56’49 millones), el Burnley (62º, 63’91), el Cruz Azul de México (45º, 91’5) o el Newcastle (19º, 191’86). Por poner unos ejemplos.
Si nos vamos a los grandes de Europa, la comparación es abrumadora. El Manchester City ha gastado 954 millones (1.440 millones en fichajes y 488 en ventas), el United 895, el PSG 785 o el Barcelona 562. Es decir, el actual subcampeón de la Champions ha gastado diez veces más de dinero que el Atlético desde 2012 hasta 2020. En España, es el tercero que más ha gastado, tras Barcelona y Real Madrid (191’7 millones). Es decir, que el Madrid ha invertido casi 150 kilos más que el Atlético y el Barcelona, ¡más de 500! El Sevilla, en cambio, lejos de gastar, ha ganado casi 30 millones en este tiempo.
SUELDOS, INGRESOS POR CHAMPIONS Y TV…
Obviamente, el desembolso que el Atlético debe realizar ahora en salarios (comenzando por el del técnico, de los mejores pagados del mundo) nada tiene que ver con el que se hacía en los primeros tiempos del Cholo en el Vicente Calderón. Tampoco los ingresos por participación en competiciones o por derechos televisivos, claro. Es ahí donde se nota la mano de Diego Pablo Simeone, el gran artífice de este enorme crecimiento del club a nivel deportivo y económico y que le ha permitido, entre otras cosas, cambiar de estadio. Una especie de ‘milagro’ teniendo en cuenta lo conseguido a nivel deportivo por el Atlético de Madrid.
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