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El nuevo derbi de Simeone

En toda la era Simeone, el Atlético de Madrid nunca ha irrumpido en el derbi en terreno del Real Madrid ni en la cima de la Liga ni con la preponderancia en la clasificación de ahora ni con un estilo como el actual; nuevos factores para un nuevo derbi, que propone una prueba definitiva para su evolución.

No hay mejor territorio para comprobar hasta qué punto ha crecido el conjunto rojiblanco en cuanto a su renovada perspectiva del juego de esta temporada, mucho más posesiva con la pelota, mucho más ofensiva y mucho más combinativa, que un duelo contra el eterno rival en campo ajeno, como tampoco hay ningún encuentro que tiente más al técnico al repliegue que las visitas al Santiago Bernabéu.

Ha sido casi una constante -muchas veces por planteamiento propio y otras por empuje del Real Madrid- en los 14 derbis ya del Atlético de Simeone sobre el césped del Bernabéu, que este sábado cambiará su escenario al estadio Alfredo Di Stéfano de Valdebebas. En cuatro ha ganado, concentrados entre 2013 y 2016; en cinco ha empatado y en otros cinco ha perdido, incluida la última visita la pasada campaña.

Es un recorrido de contrastes en ese campo. Ahí ha sido capaz de ganar una Copa del Rey, en 2013, por 1-2, en la prórroga con un gol de Joao Miranda, con el que derribó además catorce años de frustraciones constantes del Atlético contra ese adversario. Desde 1999 hasta ese momento no lo ganó, con el peso que eso conllevaba, porque entre otras cosas su momento entonces no estaba a la altura ni de su historia ni de su presente, entre los mejores de Europa.

Ahí también construyó la Supercopa de España de 2014, con un 1-1, que le valió para ser campeón después, porque ganó en el estadio Vicente Calderón por 1-0 en la vuelta; logró la clasificación en los octavos de final de la Copa del Rey en 2015, con un ‘doblete’ de Fernando Torres y ganó tres veces en la Liga, además las tres consecutivas, por 0-1 en el curso 2013-14, por 1-2 en el 2014-15 y por 0-1 en el 2015-16.

Pero, a la vez, Simeone ha sufrido allí batacazos sonoros. Uno por encima de todos: el incontestable 3-0 que padeció en el duelo de ida de las semifinales de la Liga de Campeones del 2 de mayo de 2017, con tres goles de Cristiano Ronaldo, con un Atlético desfigurado, preocupado de su defensa y sin respuesta en ataque.

Es la derrota más dura allí del técnico. Sin duda. Ni siquiera un 3-0 idéntico en la Copa del Rey desató las críticas que sí generó el decepcionante encuentro de entonces en la máxima competición europea. No planteó ni siquiera un ataque en 90 minutos. Ni con 1-0 ni con 2-0 ni con 3-0, desbordado por la eficacia de Cristiano.

DE LA ÚLTIMA DERROTA EN EL BERNABÉU A 26 JORNADAS INVICTO

Y ahí, precisamente, fue su última derrota en la Liga: el pasado 1 de febrero por 1-0. Desde entonces, el conjunto rojiblanco ha sido invencible en el campeonato. Nadie ha logrado doblegarle en el recorrido de 26 jornadas invicto que enlaza ahora, que incluye además las siete victorias consecutivas que le han hecho líder.

Un vaivén de sensaciones, que despertaron o agudizaron críticas y halagos, siempre sujetos a la evidencia del resultado, con versiones diferentes y distantes, casi siempre con las prioridades tácticas y defensivas como punto de partida para abordar la victoria.

Ahora idea sus planteamientos desde otra perspectiva más ofensiva y más de posesión. Desde otro prisma y desde otro sistema, implantado y consolidado el 3-5-2. ¿También este sábado? Es una incógnita en un derbi que se mueve en parámetros diferentes a los anteriores en ese sentido. Un nuevo escenario en la era Simeone.

Nunca había surgido desde la cima para un derbi contra el Real Madrid como visitante. Ni en 2012-13 (2-0) ni en 2013-14 (0-1) ni en 2014-15 (1-2) ni en 2015-16 (0-1) ni en 2016-17 (1-1) ni en 2017-18 (1-1) ni en 2018-19 (0-0) ni en 2019-20 (1-0). Son nada más dos derrotas en sus ocho desplazamientos ligueros al campo madridista.

Y nada más una vez había llegado con tanta distancia en la tabla como ahora: seis puntos, además de un partido menos que él. Fue en 2012-13, cuando se enfrentó al Real Madrid desde la segunda plaza y con ocho puntos de renta. Entonces perdió por 2-0 en el Bernabéu, aunque aquel momento no es en absoluto comparable al actual, por una diferencia de plantillas entonces que ya no es así en el presente.

Jamás, tampoco, el momento del Atlético de Simeone había diluido tanto la condición de favorito del Real Madrid en un choque en terreno madridista. Ni siquiera en 2013-14, donde lo había ganado todo cuando se presentó y venció por 0-1 en el Santiago Bernabéu. No festeja un triunfo allí desde el 27 de febrero de 2016: 0-1.

Ahora rebusca la victoria. “Vamos con muchas ganas de competir y de ganar, que es lo que queremos, sumar de tres en tres y seguir fuertes como estamos en la Liga”, expresó el defensa Mario Hermoso. “Es una fecha señalada para todos los atléticos. Es un partido muy especial”, señaló Koke Resurrección, el capitán rojiblanco.

Sellada este miércoles su clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones en Salzburgo (0-2), el Atlético ya mira al derbi con tres bajas: Diego Costa, que ya hace trabajo sobre el césped en su proceso de recuperación de una trombosis en la pierna; José
María Giménez y Manu Sánchez, con sendas lesiones musculares. El resto están disponibles para Simeone, ante un nuevo derbi.


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