Ja Morant lo tiene todo, pero su comportamiento puede llevarle hacia un callejón sin salida que le cueste millones y millones en contratos deportivos y acuerdos de patrocinio. La estrella estadounidense de 23 años, jugador franquicia de los Memphis Grizzlies, tiene detrás suyo a grandes marcas como Coca-Cola y Nike, que valoraron seriamente cancelar su apoyo al deportista después de su primer vídeo mostrando un arma en las redes sociales.
Ahora, la segunda instancia tropezando con la misma piedra puede resultar definitiva. Powerade firmó días antes de la polémica de la pistola en el club de alterne en Denver un contrato multianual y millonario con el objetivo de relanzar la imagen de su bebida energética. Solo en 2023, se esperaba una inyección de más de 10 millones de dólares en anuncios de la marca con Morant como embajador principal. Su primera reacción fue cancelar la proyección del anuncio televisivo hasta nuevo aviso.
Parecía que con el arrepentimiento mostrado y el perdón de la NBA y su franquicia, Morant había sido capaz de salvar sus vínculos contractuales con sus principales patrocinadores. El nuevo episodio, que le ha valido una suspensión temporal de todas las actividades del equipo hasta que se concrete una sanción definitiva por parte de la liga, amenaza con arrebatarle todo.
Morant tiene acuerdos con BodyArmor, Beats by Dre, Uber Eats, Panini America y PSD, marcas que no se han pronunciado sobre los sucesos recientes que afectan a uno de sus ilustres embajadores. Solo tras el primer vídeo y su arrepentimiento, Nike optó por apoyar al jugador de los Grizzlies. “Apreciamos que Ja haya tomado responsabilidad y que se tome el tiempo para recibir el apoyo que necesita. Apoyamos su decisión de priorizar su bienestar”, declaró la multinacional, que iba a sacar las primeras zapatillas personalizadas de la estrella este mismo año.
El nuevo episodio puede agotar la paciencia de los patrocinadores, y queda por ver cómo actuarán los Grizzlies y la NBA. Su primer escándalo hizo que su nombre desapareciera de las votaciones por los quintetos All NBA, una condición que le hubiera asegurado 40 millones de dólares más en su contrato de casi 200 con Memphis.