El once de leyendas del Mundial de México de 1970

El Mundial de México 1970 es considerado para muchos como el mejor de todos los mundiales disputados hasta la fecha o al menos del siglo XX. Marcado por el exultante nivel que demostraron muchas de las selecciones durante el torneo además de dejarnos para el recuerdo unos encuentros de infarto, sobre todo el exhibido en las semifinales entre Italia y la República Federal de Alemania, como también imágenes ilustres como la ‘Intervención del Siglo’, la protagonizada por
Pelé y Gordon Banks
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Resulta difícil escoger a once protagonistas para conformar el once ideal del Mundial de México de 1970 dado el gran juego desplegado por muchos. La ‘magia’ del brasileño Pelé, la infalible puntería de ‘torpedo’ Müller y sin olvidar a Franz Beckenbauer, un seguro de vidas para cualquier zaga. Sin embargo, la ocasión merece el esfuerzo para escoger a los ‘once fantásticos’ de aquella espléndida Copa del Mundo.

Debajo de los palos, sin duda, el hombre que se erigió por encima de todos fue Ladislao Mazurkiewicz, considerado por muchos como el mejor guardameta uruguayo de todos los tiempos. De grandes reflejos ‘felinos’ era excepcional por su gran agilidad entre los tres palos. En la zaga, cuatro hombres fueron implacables en tareas defensivas. El brasileño Carlos Alberto, que por aquel entonces asombró con tan sólo 22 años además de otro uruguayo, Atilio Ancheta, que cuajó un torneo de ‘aúpa’, y los ya contrastados Franz Beckenbauer y Giacinto Facchetti, que protagonizaron unas semis para el recuerdo.

En el medio campo con formación de tres, el de la ‘canarinha’ Gérson de Oliveira, apodado la ‘zurda de oro’ junto a su insustituible compañero de filas Roberto Rivelino, inconfundible por su gran mostacho, y el gran Bobby Charlton, otro que para muchos es el mejor futbolista inglés que pisó el césped.

Como tridente de ataque, ‘O Rei’ Pelé por la banda derecha y Jairzinho por la banda izquierda, y como principal puñal, Gerard Müller, el cañonero germano que se convirtió en el máximo anotador en aquella edición al sumar diez tantos. Como jugador número doce incluiríamos a Teófilo Cubillas, la revelación de aquel torneo que cumple ya 50 años de historia.