Foro Asturias, que llegó a gobernar el Principado en 2011, presentó este viernes una querella contra su fundador, Francisco Álvarez-Cascos, por los presuntos delitos continuados de apropiación indebida y administración desleal tras encargar una auditoría sobre sus gastos. La querella denuncia que tomaba “a préstamo dinero del partido”, firmaba “contratos inexistentes” y adquiría “videojuegos para sus vástagos” con cargo a la formación. El vicepresidente con José María Aznar afirma que “todo es una campaña para convertir a Foro en un apéndice del PSOE”.La querella depositada este viernes en los juzgados de Oviedo contra Francisco Álvarez-Cascos por apropiación indebida y administración desleal recoge los polémicos gastos del fundador del partido y exvicepresidente del Gobierno con José María Aznar avanzados en EL PAÍS el pasado diciembre. El partido encargó entonces una auditoría externa incorporada ahora en la documentación presentada en los juzgados junto a decenas de facturas. Foro Asturias ha puesto el asunto en manos de Luis Llanes, el abogado que presentó la querella contra el asturiano José Ángel Fernández Villa, condenado por apropiación indebida durante su etapa como sindicalista minero.La querella asegura que, “amparado en la incipiente juventud de la organización de la que fue su inspirador y gran gurú, en la carencia manifiesta de mecanismos de control y ostentando el control absoluto y férreo del partido sirviéndose de la ausencia de nombramiento de la figura de tesorero”, Cascos desarrolló hasta su cese “actos que le generaron pingües beneficios a la par que un manifiesto empobrecimiento de las arcas del partido”. La formación estima en 1,8 millones de euros el coste total para sus arcas. Entre 2012, ya fuera de la presidencia del Principado, y 2014 percibió 457.276 euros de sueldo, más 33.076 de gastos de seguridad social y otros 81.946 euros en dietas. El partido tiene actualmente dos diputados en el Parlamento asturiano, de 45 escaños. A preguntas de EL PAÍS sobre las acusaciones lanzadas por su partido, Álvarez-Cascos dijo este viernes que las cuentas de la formación fueron auditadas por el Tribunal de Cuentas, que nadie puso pegas a su sueldo estos años y que se trata de una “campaña goebbelsiana”. “Quieren liquidarme para convertir Foro en un apéndice del PSOE y apostar por la cooficialidad del asturiano”, aseguró.El documento cita, entre otros gastos, el alquiler de una sede para la formación en Madrid a una sociedad familiar de la que formaba parte su entonces esposa, María Porto —171.000 euros, según la auditoría externa—, además de “tasas derivadas de licencias de pesca o las devengadas por las pruebas psicotécnicas para la licencia de armas”. “Llegó a cobrar los mítines de la primera campaña electoral como conferencias”, asegura un miembro de la dirección del partido. Según la auditoría, Álvarez-Cascos percibió por ese concepto 24.171 euros en 2011. A preguntas de este diario, el exvicepresidente del Gobierno con José María Aznar afirma que cedió gratuitamente esa sede al partido en 2011 y 2012 y que después sí pagó un alquiler. Cascos admite que quien cobraba ese arrendamiento era la empresa de su grupo “familiar”.La querella incluye un capítulo dedicado a lo que denomina “gastos que sencillamente suponían un manifiesto desprecio por las reglas más elementales de respeto a los contribuyentes y a los afiliados”, entre los que cita “la adquisición de zapatos para sus vástagos; billetes de tren para desplazarse aquellos a Córdoba; compra de videojuegos y comida en Madrid, abriendo el abanico familiar, la reparación de un vehículo cuya titularidad correspondía a la que entonces era su esposa o la satisfacción de un hotel en el Principado al padre de aquella”.Fuentes de la directiva de Foro Asturias aseguran que decidieron expulsar a Cascos del partido aunque el veterano político asturiano dice no conocer tal decisión y asegura que la comisión es ilegítima.”
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El partido que fundó Cascos se querella contra él por apropiación indebida
