Adnan
Januzaj ha encontrado en la Copa del Rey una vía de escape en la que poder desplegar toda su calidad. Por mucho que enfrente de momento sólo haya tenido a jugadores amateurs, el belga parece haber reencontrado las ganas de jugar. Aunque todavía tiene detalles que pulir.
Imanol
Alguacil volvió a darle la titularidad al de Bruselas y en los primeros compases del partido fue el txuri urdin más participativo. Cada vez que cogía el balón en la banda derecha, los ceutíes enviaron un hombre más a la ayuda para tratar de pararle. Ni por esas.
Januzaj salió fácil de cada regate y se zafó de rivales con suavidad hasta tal punto que desesperó a su par. Su primera toma de contacto con el cuero fue un córner botado desde la derecha que casi acabó en gol olímpico de no ser porque David
Ramírez estuvo avispado para sacar los puños.
Su jugada más peligrosa del primer tiempo, en todo caso, llegó en una jugada típica del extremo. Partiendo desde la derecha, se puso el balón en la izquierda para sacar un zapatazo con rosca que acabó lamiendo el larguero. Fue en ese momento cuando le sobraron acciones que no le ayudan en su reto de ganarse de nuevo el puesto. Realizó algún pase del exterior con desgana y tampoco ayudó en varias acciones a Zaldua, que se las tuvo tiesas con Chekir.
De más a menos
Pero como casi siempre, su presencia e importancia en el juego txuri urdin disminuyó. Ahí emergió Ander
Barrenetxea como hombre más peligroso en el ataque donostiarra y fue Sangalli quien abrió la lata. Mucho más espacio para Januzaj, que hizo un traje a Guti generando un ‘ooh’ en la grada.
Lo que no se le puede achacar a Januzaj es que, hasta hora, está consiguiendo algo que es incapaz de hacer en liga: ver puerta.
Ander
Barrenetxea desbordó a Álex
Sánchez por la izquierda metiendo un centro medido a la cabeza de Januzaj. Sólo tuvo que meter la frente para hacer el 0-2 y sentenciar el partido. El belga vuelve a sonreír, al menos en Copa.
La competición del K.O. se está convirtiendo en una nueva oportunidad para Januzaj, que de momento sigue sin convencer a Imanol en Liga puesto que sus apariciones como titular se limitan a cinco. Con el tanto del Murube ya suma cuatro dianas y es el ‘Pichichi’ de la Copa en la Real.
Tras el gol, el belga se fue apagando dejando brillar a otras estrellas hasta que fue sustituido por Portu. 67 minutos en los que se evidencian síntomas de mejoría en el paciente, aunque a un extranjero de la Real se le tiene que pedir mucho más que exhibirse ante el Ceuta.
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