El presidente del Hereda San Pablo Burgos, Félix Sancho, pidió este lunes “perdón” por el gesto que ha dado la vuelta al mundo, y en el que pedía a los jugadores arrodillarse ante el público tras el descenso y comentó que “era la única manera de pedir perdón a la afición, que lo ha pasado tan mal todo el año, hincando la rodilla”.
El equipo burgalés selló este sábado su descenso a la LEB Oro tras caer contra el Urbas Fuenlabrada en la última jornada de la Liga Endesa
Sancho asegura que el gesto “se ha malinterpretado” y que “las interpretaciones que se han dado son erróneas y falsas” y que lo único que estaba buscando es que “los jugadores que quisieran” acompañaran con el gesto no “obligar” a hacerlo y lanzó un mensaje a quienes lo han criticado “sin saber el contexto ni la situación que se estaba viviendo” haciendo alusiones a algunos mensajes en twitter que se han posicionado claramente contra el gesto.
Sancho en el momento de la polémica acción tras el partido
“Cuando sucede lo que sucede, para mí era importante pedir perdón y lo hice en primera persona, a los aficionados, que son los que nos han seguido por todos los lugares de este país, nos han acompañado por Europa, son el motor de nuestro club y por los que tanto hemos peleado”, señaló el presidente y añadió que le duele “que se saque de contexto”.
Sancho apuntó que ha hablado “con los capitanes” quiénes aseguran “no sentirse humillados” por este gesto, algo que también reconoció el jugador Alex Renfroe en su cuenta personal de twitter, precisamente uno de los jugadores que prefirió no arrodillarse sino hacer otro gesto de perdón.