El Atlético de Madrid está atravesando uno de sus peores momentos de la temporada. Los pupilos de Simeone llevan desde el mes de enero siendo incapaces de sumar dos victorias consecutivas. Este bache está provocando que tanto el Real Madrid como el Barcelona se estén acercando peligrosamente al liderato que llevan ostentando más de una vuelta.
Un bache que comenzó en el mes de febrero justo cuando el Atlético de Madrid sufrió hasta seis bajas por Coronavirus. No llegó a ser brote porque para designarse así deben ser tres contagiados en 72 horas, a lo que el equipo de Simeone no llegó por unas horas.
La primeras bajas fueron las de Carrasco y Hermoso. Dos jugadores clave que no pudieron estar contra el Cádiz tras detectarse su positivo. Los colchoneros sacaron el partido adelante ganando por 2-4 aunque ya se empezó a ver a un equipo menos sólido…
Durante la semana cayeron Joao Félix y Dembelé, el 3 de febrero el portugués y al día siguiente el galo. Dos positivos que volvieron a provocar que saltase la luz de alarma. Por suerte para los colchoneros había tiempo para preparar el encuentro contra el Celta de Vigo que se disputó el lunes en el Metropolitano.
Un partido que prepararon con las cuatro bajas ya citadas, a las que se unieron de última hora tanto Lemar como Herrera. La buena noticia es que Carrasco entró en la lista de convocados aunque sin haber completado ningún entrenamiento con el grupo… el partido se empató a dos. Un gol de Ferreyra en el tramo final dejó sin tres puntos a los rojiblancos.
A partir de ese momento y a pesar de que poco a poco los positivos por Coronavirus fueron volviendo a la dinámica del equipo comenzó un bache que a día de hoy no se ha solventado. No hay que olvidar que la Covid 19 es una enfermedad que afecta directamente a los pulmones y puede tener secuelas. A lo que se une el tiempo que han estado sin entrenar con normalidad. Al futbolista que más se le notó este bajón tras su regreso es a Joao Félix. Sea como sea, mes y medio sin ganar dos partidos seguidos. Eso es mucho tiempo para ganar una Liga.
Luis Suárez estrelló un balón en la madera en Getafe
Tras el empate contra el Celta, llegó la victoria contra el Granada por 1-2. La celebración de Saúl y Koke en el gol de Correa que le daba la victoria a los colchoneros, lo decía todo. Después de ese partido llegó el doble enfrentamiento contra el Levante. 1-1 en el Ciutat de Valencia y 0-2 en el Metropolitano. Dos partidos en los que los colchoneros por oportunidades y juego se merecieron más pero sólo lograron un punto de seis posibles.
A la derrota contra el Levante, se le unió la que sufrieron en la Champions League contra el Chelsea. 0-1 ganaron los ingleses en Bucarest. Todo ello en un partido para olvidar pero que tienen 90 minutos en Londres para dejarlo en mera anécdota.
Tras las dos derrotas sufridas, han llegado dos victorias y dos empates. Dos victorias muy sufridas ante Villarreal y Athletic
de Bilbao; y dos empates en los dos derbis en los que dio la sensación de que podría haberse llevado los tres puntos en ambos partidos.
Ahora toca mirar al horizonte. Aún quedan 11 partidos por disputarse en Liga, y que a nadie se le olvide que ahora mismo todo el mundo querría estar en el lugar que ocupa el Atlético de Madrid. Aunque antes de eso tendrá la vuelta de la Champions League frente al Chelsea, un partido en el que los colchoneros se jugarán estar en cuartos de final de la competición.
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