El PSG llama otra vez a la puerta de la Champions, escenario en el que las urgencias son cada vez mayores. No se olvida lo que pasó en marzo de este mismo año en el Santiago Bernabéu, un seísmo que provocó el cese de Pochettino a final de temporada y que obligó a volver a partir de cero. El cuadro parisino debuta esta noche contra la Juve en el Parque de los Príncipes, un estadio que ha pasado de la frustración a la indiferencia para recuperar la ilusión tras un inicio de temporada notable. Ahora, en su primera prueba seria y de entidad, tiene que confirmarlo.
Ayer, sin embargo, Christophe Galtier se encargó de quitarle algo de presión a sus futbolistas: “No creo que el PSG sea el favorito para ganar la Champions”, opinó. Ocurre que tiene a jugadores como Messi, a quien en Francia ya se le empiezan a reconocer las muchas cosas que hace bien. Tras un primer año discreto, los medios locales destacan su habilidad por ser el ideólogo de muchas de las jugadas de un PSG que gira en torno al argentino. De momento acumula tres goles en Ligue 1 y siete asistencias. Y L’Équipe, tremendamente crítico en otras ocasiones, le incluyó otra vez en su once ideal del pasado fin de semana. Basta con una mirada basta para saber si Leo se encuentra cómodo o si le pasa alguna cosa. Ahora es feliz.
Se espera que el 30 vuelva a ser el arquitecto ofensivo del PSG ante una Juve que llega a París en un momento de dudas. No obstante, y pese a su irregularidad en cuanto a resultados, cuenta con suficiente experiencia como para no echar a temblar. No tiene a Di María, aún falto de ritmo, y tampoco a Pogba, que pasará por el quirófano para solucionar sus problemas en el menisco pero Max Allegri no puso excusas: “Hay que ser inteligentes. Todo pasa por una buena gestión de balón y defenderse bien cuando no lo tengamos. Es un reto enorme”, aseguró el italiano, que a diferencia de Galtier cree que el PSG es, ahora mismo, el principal candidato a reinar en Europa. En ese sentido, todo lo que sea sumar en el Parque de los Príncipes es una buena noticia para una Juve que necesita algún estímulo más pronto que tarde.
El Benfica, obligado a ganar
El cuadro portugués sabe que tiene complicado seguir adelante con dos equipos como el PSG y la Juve en el grupo. En todo caso, sus opciones pasan por ganar los puntos que se juegue con el Maccabi Haifa. Los hombres de Roger Schmidt comienzan la Champions como locales, y llegan después de firmar cinco triunfos de manera consecutiva en la liga portuguesa, que gobiernan con autoridad.