El Valladolid es un equipo sin complejos que tiene la misma propuesta futbolística tanto de local como de visitante. Sin embargo, los números a domicilio están siendo bastante pobres. Tras la disputa de catorce jornadas, los pucelanos marchan en una cómoda onceava posición con 6 puntos de margen sobre el descenso. No obstante, los de Pacheta saben que han de mejorar las prestaciones lejos de su feudo para no pasar apuros.
Es uno de los mejores locales de la categoría, con 8 goles a favor, 8 en contra y 13 puntos de 21 posibles. Sin duda, el Estadio José Zorrilla está siendo el fortín de los pucelanos. La afición está feliz con los resultados y con las sensaciones. Ahora el objetivo es trasladar lo mismo a los partidos de visita. Ahí los números bajan considerablemente, con 5 goles a favor, 13 en contra y 4 puntos de 21 posibles. El miedo que existe en Valladolid es que en algún momento el rendimiento en casa baje y el equipo se resienta. La parte tranquilizadora es que en el desarrollo del juego no se está notando jugar en un campo u otro, sino que son las áreas la gran diferencia. En casa se marca más y se encaja menos, lo cuál se traduce en victorias.
La carencia de gol está siendo el principal hándicap durante toda la temporada, ya que los delanteros no están finos de cara a portería. Sergio León, que en principio era la última opción en ataque es el único que no está notando el cambio de categoría. Con 5 dianas se ha convertido en el hombre gol de la plantilla. Se espera que los Weismann, Guardiola y Plata rompan la mala sequía y ayuden a León en la parcela ofensiva. El Valladolid, excelente en casa y suspenso lejos del José Zorrilla.