En España hay rincones maravillosos para hacer una escapada y desconectar de la rutina en contacto con la naturaleza. En esta ocasión, ‘Traveler’ ha hecho una lista con los 50 pueblos más bonitos del mundo, entre los que hay uno de nuestro país. Un lugar con una historia apasionante, que cuenta con un gran patrimonio histórico y una gastronomía de primer nivel.
Se trata de Albarracín, un municipio de la provincia de Teruel que no ha perdido ni un ápice de su esencial medieval. A lo largo de la historia ha sido habitado por romanos, celtas y árabes, que han dejado un gran legado. Está declarado Monumento Nacional y, por su pequeño tamaño, se puede visitar perfectamente en un día.
¿Qué ver en Albarracín?
La calle De Santiago es la más bonita, y también la más visitada, de la localidad. Aquí se encuentra la Cada de la Julianeta, que actualmente alberga un taller de artistas.
La Plaza Mayor es el corazón de Albarracín. Aquí se encuentra el ayuntamiento y un mirador que ofrece unas vistas increíbles del municipio y su entorno natural.
La Catedral del Salvador es el principal templo religioso del pueblo. Su origen data del siglo XII, cuando se construyó sobre los restos de un antiguo templo románico.
Uno de los edificios más curiosos de Albarracín es la biblioteca, que se encuentra suspendida en el aire en una estrecha callejuela.
Una de las visitas clave es la Casa Azagra, muy fácil de reconocer por su color azul que destaca entre el resto de casas rojizas del municipio.
Sin lugar a dudas, un plan imprescindible es pasear por la muralla de Albarracín. El Alcázar es una fortaleza del siglo XVI que únicamente se puede visitar con una visita guiada. Aunque no queda demasiado en pie, es muy interesante.
Otra de las cosas que hacer es recorrer el sendero fluvial que discurre paralelo al río Guadalaviar. La ruta comienza en el Convento de las Carmelitas y se completa en una hora aproximadamente.
A 40 kilómetros de la localidad está el nacimiento del Tajo, donde comienzan varitas rutas de senderismo que merecen mucho la pena. Una de las más destacadas es la que lleva hasta la Cascada Batida en Calomarde, la cual es muy sencilla.
Como puedes comprobar, hay razones de sobra por las que ‘Traveler’ ha incluido Albarracín entre los 50 pueblos más bonitos del mundo. Un destino maravilloso para una escapada de fin de semana con familia o amigos.
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