Si hay una persona que no duda en hacer gala de su sinceridad frente a las cámaras es, sin duda alguna, Joaquín Prat. Dada su gran presencia en programas de Telecinco como El Programa de Ana Rosa o Ya es mediodía, el presentador no tiene reparo alguno en compartir con la audiencia algunos de sus retoques estéticos con el objetivo de que los espectadores puedan verse mejor a sí mismos de la misma manera que él lo hace.
Eso es lo que ha ocurrido precisamente en la última ocasión, cuando en el plató del espacio televisivo de las mañanas de la cadena de Fuencarral se hacía referencia al último tratamiento al que se habría sometido Juan Carlos I en una clínica en Navarra, basado en el uso de plasma y células madre para mejorar la flexibilidad de sus articulaciones, sobre todo teniendo en cuenta las dificultades de las que goza en movilidad a consecuencia de su avanzada edad. Un avance clínico del que ya habrían hecho uso algunos famosos como Andrés Iniesta y que demuestra que el propio plasma puede ser muy eficaz a la hora de llevar a cabo ciertos retoques estéticos de la mano de los mejores profesionales.
Así lo demostraba Joaquín, alegando que él también hace uso de un tratamiento parecido al del rey emérito, aunque para cuidar su cabello: «Yo lo del plasma me lo hago en el pelo. Me sacan sangre, la centrifugan, el plasma lo separan de las plaquetas…», contaba, bajo la atenta mirada de Alfonso Galán, doctor en Medicina Preventiva Antienvejecimiento y encargado de admitir que cada vez es más común el uso de plasma ya sea en retoques estéticos, infiltraciones reumáticas o como forma de prevención perfecta ante la posible caída del pelo: «Entiendo que han utilizado un tratamiento para una patología articular degenerativa. Lo habrían utilizado dentro, en las articulaciones. Las células madre no se obtienen de sangre periférica, todos tenemos células madre en nuestros tejidos, se pueden obtener de la médula ósea, de la zona posterior de la rodilla o se pueden obtener de grasa subcutánea», indicaba el especialista, dejando así entrever las grandes similitudes que el retoque de Juan Carlos I guarda con el de Joaquín Prat.
Sin embargo, ellos no serían los únicos que habrían usado el plasma para mejorar sus atributos. Georgina Rodríguez también habría hecho lo propio con tratamientos bautizados como el Plasma Rico en Plaquetas, el cual consiste en retrasar el envejecimiento prematuro de la unidad folicular; o la Masoterapia, unas vitaminas que favorecen al crecimiento del pelo y aportan vitaminas y ácido hialurónico para que luzca radiante mientras retrasa el proceso normal de caída. Dos procesos en absoluto dolorosos que forman parte de la rutina de la pareja de Cristiano Ronaldo para tener una imagen impecable al ser esta una pieza fundamental de su propio marketing.