Los propietarios del Reus han saldado las deudas que tenían contraídas con los integrantes de su plantilla, tanto la profesional como la del filial, de manera que en estos momentos están en condiciones de participar la próxima temporada en competición oficial.
El Reus actuará en
2ª B y su filial, en Tercera División, después de que el club haya realizado una trasferencia de 241.000 euros al Banco de España para saldar su deuda con los jugadores del segundo equipo. Recordemos que LaLiga dictaminó su descenso administrativo por impagos a sus jugadores a mitad de temporada, por lo que el equipo rojinegro ya no disputó la segunda vuelta del campeonato nacional de Liga.
Ahora la resolución final del caso está en manos de los organismos competentes. De no surgir resolución en contra alguna, la presencia del Reus y su filial en 2ªB y 3ª, respectivamente, el próximo año será un hecho.
El Juvenil renuncia a la División de Honor
El Juvenil del Reus también ha sido afectado por los cambios organizativos. El club ha decidido renunciar a su plaza en la División de Honor y su objetivo es jugar en Preferente, dos categorías menos. Ahora tendrán que ver si federativamente es posible por un tema de plazas.
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