El Sevilla, pese a la crisis económica de la que avisa Monchi en los mercados derivada de la pandemia de Covid-19, ha invertido ya de cara a la temporada 20-21 algo más de 50 millones de euros, siendo ya el tercer club español en nivel de gasto de momento tras el Barcelona y el Atlético.
El fichaje del argentino Marcos
Acuña, cerrado a falta de que el club le dé oficialidad, le reportará a la entidad andaluza un gasto de 10 millones de euros más otros 2 en variables y se una a las incorporaciones de Rakitic y Óscar
Rodríguez, así como a las inversiones que el Sevilla ha tenido que hacer con Suso y Bono, quienes se quedarán en propiedad tras sus periodos de cesión. En el caso del gaditano, en su contrato con el Milan estaba especificada a través de una cláusula la obligatoriedad de ejercer la opción de compra (por valor de 21 millones) en el caso de que el Sevilla se clasificara para la Champions
League, circunstancia que se cumplió al quedar el equipo de Lopetegui cuarto en la Liga. Bono, por su parte, se quedará en Nervión al abonar el Sevilla unos 4,5 millones al Girona, club por el que estaba cedido.
Por último, las incorporaciones de Óscar
Rodríguez y Rakitic, en el apartado de inversión por traspaso, han supuesto un gasto de casi 15 millones de fijo el madrileño y algo más de 1,5 el croata, cuyo mayor coste para el Sevilla llega en su ficha.
A la espera de que el Real Madrid se mueva, Monchi ha sido uno de los que más ha animado el mercado y sólo Barcelona y Atlético lo superan, fundamentalmente por sus inversiones en Pjanic y Morata.
Rakitic, uno de los fichajes estrella del Sevilla
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