El Sevilla obra un milagro en Old Trafford

No hay mejor refugio que la Europa League para el Sevilla, lugar en el que se aísla de todos sus problemas. Apurado como se encuentra en liga, hizo la metamorfosis en Old Trafford y se resarció con un empate esperanzador frente al United. El respeto reverencial que se ha ganado en esta competición le llevó a obrar un milagro en Manchester. Tras ser atropellado en el primer tiempo, reaccionó tras el descanso y dos goles en propia en el tramo final le animan a llegar a semifinales (2-2).

No ha tenido tiempo de moldear Mendilibar a este Sevilla, pero el equipo supo sobreponerse a sus propias dudas. El entrenador vasco no puso a su mejor once en Manchester, preso del pánico que supone ir a Mestalla el domingo sin estar al cien por cien. Acostumbrado a contragolpear, el United fue un martillo en un primer tiempo en el que pudo campar a sus anchas. Antony por derecha y Jadon Sancho por izquierda, con Bruno Fernandes y Martial por dentro.

Descolorido el Sevilla, apenas pudo contrarrestar a un United que disfrutó como si estuviera en un parque de bolas. Eléctrico, intenso y perspicaz cada vez que se aproximó a Bono, agobiado ante el acecho. Un pase profundo de Bruno Fernandes a Sabitzer descorchó la noche: 1-0. El ex del Bayern rajó a la zaga sevillista, experto en aparecer por sorpresa. El remate, envenenado tras un rebote, fue inalcanzable para el meta visitante.

Hizo daño el golpe. Al Sevilla, al que aún le falta una capa de pintura, sufrió en sus carnes lo que significa jugar en Old Trafford. Tras ganar la Carabao Cup, ahora la afición del United se entusiasma con alzar la Europa League. En base al rendimiento del equipo, tiene razones para confiar en esa posibilidad. Fue un calvario el primer tiempo para el cuadro de Mendilibar, un entrenador que debutaba en Europa en la cancha de un United endiablado.

Bloqueado como estaba el Sevilla, apretó la grada para rentabilizar la superioridad. Un error de bulto de Nianzou acabó por descoser a los del sur de España. Martial, disfrazado de mago, regaló un pase filtrado fantástico para que otra vez Sabitzer se llevara el protagonismo: 2-0. Sin autoridad en el juego, Old Trafford fue una pesadilla para el Sevilla, tan solo aliviado tras la amarilla a Bruno Fernandes, que se perderá la vuelta en el Pizjuán.

En medio de la tormenta, el Sevilla estuvo a punto de ponerse a salvo pero el remate de cabeza de Nianzou fue repelido por De Gea en primera instancia y por Varane después, cuando el esférico casi rebasaba la línea. El resoplido de Mendilibar representó mejor que nada el ánimo sevillista, que sin embargo aguantó con más percha en el segundo tiempo. Pese a todo, reivindicó su escudo en Europa y le aguantó el pulso al United.

También tuvo su pizca de suerte. La cruceta fue su mejor aliada después de que una jugada maravillosa de Antony acabara en la madera. Pudo ser el adiós a la eliminatoria, pero un campeón nunca se rinde y el Sevilla es el rey de la Europa League por algo. Más creyente que nadie, Jesús Navas fue a por un balón que no despejó Malacia de entrada. Después, por error, puso la pierna con tan mala suerte que sorprendió a De Gea: 2-1.

El Sevilla es a la Europa League lo que el Real Madrid es a la Champions: inmortal. Impredecible noche en Old Trafford, loca hasta el final. El United, superior durante mucho rato, se vio neutralizado en un santiamén, mermado tras las lesiones de Varane y de Lisandro. Un remate con la testa de En-Nesiry rebotó con fortuna en Maguire, retratado como de costumbre. De Manchester se llevó el Sevilla un tesoro. La eliminatoria le pone en un escenario ideal con la vuelta en el Pizjuán.