El Sevilla ha tenido que recurrir a la intermediación de la FIFA para cobrar uno de los plazos estipulados con el Atlético
Mineiro en el acuerdo alcanzado por ambas entidades para la cesión con obligación de compra del lateral izquierdo Guilherme
Arana
, quien fue una gran apuesta de Óscar Arias en su época en la dirección deportiva y que no cuajó en Europa.
Arana, tras llegar en 2018 al Sevilla como campeón del Brasileirao con el Corinthians y tras ser elegido el mejor lateral izquierdo de su país, no demostró en el Sánchez Pizjuán el elevado coste de su inversión, más de 11 millones de euros. Tras una temporada y media con muy poca presencia en el equipo, fue cedido al Atalanta, donde tampoco recuperó su nivel y fue despedido antes de tiempo por el equipo italiano.
Según la prensa brasileña, el pago se ha hecho efectivo hoy
Fue entonces cuando, ya con Monchi de regreso, el jugador acabó en el Atlético Mineiro en calidad de cedido, volviendo además a demostrar su verdadero potencial e incluso siendo llamado para la selección absoluta. El problema ha venido cuando el club de Minas Gerais se ha demorado en el pago de los 2,5 millones de euros que debía pagar al Sevilla, por lo que ha tenido que intervenir la FIFA. Según la prensa brasileña, el pago, con sus intereses de demora, se ha hecho efectivo este mismo jueves, por lo que el Atlético Mineiro tiene ahora en propiedad el 50% del pase del jugador.
El acuerdo estipula que el 30 de junio los brasileños deben abonar otro plazo de 2,5 millones, tras el que el 90% de los derechos económicos del jugador estarán en su poder, quedándose el Sevilla con el 10% restante.
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