En el baño, la alcachofa de la ducha es una de las zonas más complicadas de limpiar, así que seguro que te vendrá muy bien conocer este truco que se ha hecho viral en redes sociales. A través de la alcachofa de la ducha pasa el agua con la que nos duchamos, la cual lleva cloro y minerales, entre otros.
Por lo tanto, es lógico que con el paso del tiempo estos sedimentos poco a poco se vayan acumulando en los agujeros, hasta que terminan por obstruirlos. Es fácil darse cuenta de esto, ya que el agua no sale con el mismo caudal de siempre.
¿Cómo limpiar la alcachofa de la ducha?
Este truco es muy sencillo y rápido de poner en práctica. Estos son los pasos que debes seguir:
- Si es posible, desenrosca la alcachofa de la ducha y frota los difusores con un estropajo para eliminar la suciedad más superficial.
- A continuación, prepara en una palangana una mezcla de una parte de vinagre de limpieza con tres de agua. El vinagre de limpieza es un potente desinfectante natural, así que es muy efectivo para eliminar las bacterias, hongos, moho y otros microorganismos. Si la alcachofa de la ducha está muy sucia, también puedes añadir un par de cucharadas de bicarbonato de sodio.
- Cuando tengas la mezcla lista, sumerge la alcachofa de la ducha y deja que actúe 12 horas. Si la alcachofa es fija y no la puedes desenroscar, puedes atar una bolsa con esta mezcla que la recubre.
- Una vez transcurrido el tiempo, vuelve a frotar con un cepillo de dientes para eliminar los restos de suciedad que queden.
- Por último, aclara con abundante agua caliente durante dos minutos.
- Sécala con un trapo de algodón y vuelve a colocarla en su sitio.
Truco para dejar la mampara impoluta
Además de la alcachofa, con el vinagre de limpieza también puedes dejar la mampara de la ducha como nueva. Debes preparar una mezcla casera con los siguientes ingredientes: vinagre de limpieza, el zumo de un limón y agua caliente.
Esta mezcla es capaz incluso de quitar el moho de las juntas. Ponla en una botella con aerosol y pulveriza por toda la mampara, tanto la cara interna como la externa.
Deja que repose cinco minutos y luego utiliza un paño de microfibra para aclarar. Verás cómo desaparece la suciedad y cal acumulada como por arte de magia. Para dejarla todavía más brillante, puedes repetir el proceso.
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