el uso secreto que tiene el reposacabezas del coche

El reposacabezas es un elemento del coche bien conocido por todos, pero quizá no sabías que tiene una función secreta que te puede salvar la vida. Lo primero a tener en cuenta es que no es una pieza relacionada con la comodidad, sino con la seguridad, así que es necesario regularlo correctamente. Y es que, en caso de colisión, accidente o frenada de emergencia controla el movimiento y el desplazamiento de la cabeza con respecto al tronco y el resto del cuerpo. Por lo tanto, puede reducir la gravedad de la lesión, sobre todo en el cuello y la vértebras.

Durante un viaje son muchas las situaciones de emergencia que pueden suceder, así que es fundamental conocer para qué sirve cada uno de los elementos que hay en el coche. Por ejemplo, puedes verte sorprendido por una crecida de agua que te obligue a abandonar el vehículo a la mayor brevedad.

Pero, ¿qué puedes hacer si las puertas se quedan bloqueadas? La solución es salir por alguna de las ventanillas. Nunca hay que hacerlo por la luna trasera o por el parabrisas, ya que romper estos cristales es casi imposible.

Para romper la ventanilla, solo tienes que desencajar completamente del asiento uno de los reposacabezas, ya que al extraerlo tiene dos varillas muy resistentes con un acabado roma en el extremo. Este está específicamente diseñado para romper los cristales en caso de emergencia. Así, el reposacabezas puede convertirse en un objeto contundente con el que romper la ventanilla para salir por ella y así ponerte a salvo.

Consejos para regular el reposacabezas

Tal y como hemos señalado, es fundamental hacer un uso correcto del reposacabezas para que cumpla su función principal. A la hora de regularlo, debe estar lineal con la zona superior de la cabeza. La postura ideal de la cabeza es una postura vertical y alineada con el cuerpo.

En el caso del conductor, también es necesario ajustar el asiento según la distancia de los pedales y la distancia al reposacabezas. Lo ideal es que el asiento no se incline más de 25 grados y la distancia entre el reposacabezas y la cabeza debe ser idónea.

Con el objetivo de mejorar el diseño de los reposacabezas para brindar una mayor seguridad, algunos fabricantes están desarrollando sistemas electrónicos. Su funcionamiento se activa a través de sensores, aunque el principio está basado en muelles que ponen el reposacabezas en movimiento una vez se activa.


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