El partido de ida de las ‘semis’ de Champions entre el Liverpool y el Villarreal siguió el guion esperado. A pesar de la gran temporada que el Submarino Amarillo está cuajando en Europa, el conjunto ‘red’ ha demostrado durante todo el año que, son pocos, los que le pueden hacer frente en un duelo de tú a tú. Con el 2-0 en contra, Unai Emery tendrá la oportunidad de demostrar de nuevo su valía como entrenador y buscar soluciones para hacer frente al poderío de los pupilos de Jürgen Klopp.
La efectividad de la posesión
El Villarreal no pudo desplegar su juego gracias a la presión intensa del Liverpool. Con un dominio casi total de la posesión (71 a 29) a favor de los ingleses, el cuadro ‘groguet’ tuvo prácticamente imposible acercarse a la portería de Alisson Becker. Un único remate pudo realizar el Villarreal en el partido. Por contra, el equipo inglés se acerco en más de 90 ocasiones al área defendida por Gerónimo Rulli, llegando a rematar 20 veces.
Además del asedio del Liverpool, la precisión que tuvieron en el pase explica tanta superioridad durante el encuentro. Los jugadores ingleses conectaron con éxito 674 ocasiones en el partido por los 185 pases del Villarreal. Con un 90% de efectividad en las combinaciones, los jugadores de Klopp prácticamente no erraron en el pase y con tanta posesión fue un monólogo inevitable. El Villarreal no estuvo del todo desacertado en este aspecto y tuvo un acierto del 70%, aunque la mayoría de las conexiones fueron entre los centrales y el portero.
La agresividad en el juego
El punto fuerte de este Villarreal es que, a pesar de la superioridad del rival, el equipo castellonense no bajó los brazos y estuvo compitiendo hasta el final. Al igual que hiciera en Múnich ante el Bayern y en algunos tramos de la eliminatoria frente a la Juventus, el equipo de Emery se mostró muy sólido en defensa y agresivo en la anticipación. Los números hablan por si solos y tiene mérito que, con tanta opción ofensiva del Liverpool, los zagueros del Villarreal lograran hacer trabajar tan poco a su guardameta.
La defensa castellonense se puso el mono de trabajo y despejó con éxito 60 de los 90 ataques ingleses. En la recuperación, también estuvieron a la altura. Robaron el balón en 41 ocasiones y tuvieron un 100% de acierto cuando se tiraron al suelo para recuperar el balón. 7 de 7 en lo que se conoce como ‘tackle’.
Queda la vuelta
Si Emery, como bien ha demostrado en su carrera, es capaz de encontrar la fórmula para anular las ofensivas del Liverpool, la eliminatoria todavía está abierta. Con la capacidad de sacrifico que ha demostrado el Villarreal se antoja un partido de vuelta muy emocionante. Remontadas más difíciles se han vivido en Champions en los últimos años. Quedan 90 minutos para que la afición del Villarreal siga soñando.