LOS ANGELES, California – Pastillas comercializadas en internet como supuestos calmantes están arrebatándole la vida a jóvenes que las están consumiendo sin saber que contienen una potente droga artificial.
Las inesperadas muertes de Daniel Puerta y Adrian de Jesús, dos jóvenes de 16 y 19 años, fueron alarmantemente parecidas. Ambos fueron víctimas de esta tendencia en Los Ángeles.
“Lo mataron a mi hijo, lo mataron lo envenenaron”, cuenta Maria Ortega, madre de Adrián de Jesús. “No fue algo de sobredosis, fue envenenamiento”.
Los padres de ambos jóvenes alegan que ellos contactaron a un vendedor de supuestas píldoras de Percocet, un tranquilizante que solo se vende con receta médica. Los jóvenes ordenaron el fármaco por una red social en el sur de California y fueron hallados sin vida en sus habitaciones.
“Tienes un narcotraficante llevándote la pastilla a tu puerta, tu propia casa”, dice Jaime Ignacio Puerta, padre de Daniel. “Mi hijo murió en su alcoba”.
Una flagelo que deja muchas víctimas y ganancias
Según la Administración de Control de Drogas (DEA), los carteles, utilizando laboratorios en México, mezclan intencionalmente fentanilo en pastillas falsas vendidas como tranquilizantes o analgésicos, porque es barato, adictivo y aumenta sus ganancias.
Los compradores, muchas veces jóvenes, no tienen idea de lo que están consumiendo.
Una dosis letal de fentanilo equivale a solo dos granos de sal pero quienes fabrican estas pastillas fraudulentas tienen poco control sobre las dosis. Se calcula que 1 de cada 4 pastillas contiene lo suficiente para matar a alguien.
De acuerdo con la DEA, es 50 veces más poderoso que heroína
La DEA ha visto un exponencial aumento en muertes accidentales por esta sustancia y quieren capturar a los responsables.
“Investigamos al cartel de Jalisco Nueva Generación y perseguimos a narcotraficantes como “El Mencho” y a otros capos que comercializan esta droga”, señala Bill Bodner, agente especial de la DEA en Los Ángeles.
Se calcula que el fentanilo es el responsable del 50 por ciento de las muertes accidentales por drogas en el condado de Los Ángeles. A nivel nacional, alrededor de 90,000 personas murieron a consecuencia del fentanilo en el 2020, según la DEA
Campaña de concientización
Las autoridades destacan que la mejor manera de salvar vidas es alertando a la comunidad.
“No comprar drogas a través de la red”, señala un agente encubierto de la DEA. “Nunca se sabe lo que hay”.
Los padres de miles de víctimas se han unido para impulsar leyes estatales en California para que distribuidores de fentanilo puedan enfrentar condenas de homicidio. Con sus testimonios, intentan advertir sobre el envenenamiento con pastillas piratas.
“Salvar a más familias de la agonía que nosotros estamos pasando”, dice María Ortega. “Quebró nuestra familia para siempre y salvar a esos niños que son inocentes”.
El padre de Daniel ha colocado frente a su casa un aleccionador aviso para que otros sepan que su hijo sin saberlo, cayó en las redes mortales del fentanilo por una pastilla adulterada
Los padres explicaron a la policía cómo hallaron el misterioso paquete.
“No escoge ni raza, ni estatus social, ni estatus económico, ni color de piel”, dice Jaime Ignacio Ortega sobre este flagelo. “Este fenómeno está afectando a todos los segmentos”.
La madre de Adrián de Jesús tuvo que recoger su diploma de graduación, en su ausencia. Su esperanza es que a otras madres no les ocurra lo mismo.
“No puedo traer a mi hijo de regreso pero ustedes si pueden salvar a alguna familia, aunque sea salvar una vida”, dice Ortega.
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