El cuerpo sin vida del futbolista ghanés Christian Atsu, exjugador del Chelsea, entre otros, ha sido encontrado bajo los escombros de una residencia de la ciudad turca de Hatay, una de las más destruidas por los fuertes terremotos que azotaron a Turquía y Siria.
El representante de Atsu en Turquía, Murat Uzunmehmet, confirmó la muerte del jugador internacional de la selección ghanesa y del club turco Hatayspor, que estaba desaparecido.
Atsu, de 31 años, el delantero, que ha militado también en el Porto, Málaga o Newcastle, entre otros clubes, falleció bajo los escombros de su vivienda en la “Residencia Ronesans”, donde familiares suyos, que se habían trasladado a Turquía, seguían desde hace días los trabajos de rescate.
Fatih Ilek, gerente del Hatayspor, dijo que Atsu había planeado dejar el club, y había comprado un billete de avión a Francia para el mismo día del terremoto, pero desistió de ese plan tras marcar un gol en el último minuto del partido contra el Kasimpasa de Estambul y canceló el viaje.
Tenía billete de avión, pero renunció a irse porque jugó bien y marcó. Le pilló un terremoto en su día más feliz.
Başımız sağ olsun.
Göçük altında kalarak hayatını kaybeden futbolcumuz Christian Atsu’nun cenazesi memleketi Gana’ya gönderilmek üzere yola çıkmıştır. Seni unutmayacağız Atsu. Mekanın cennet olsun güzel insan. Üzüntümüzün tarifi yok. Huzur içinde uyu. pic.twitter.com/2CSVfwfEuR
— Hatayspor (@Hatayspor_FK) February 18, 2023
Atsu estaba desaparecido desde el primer día de los sismos, de 7.7 y 7.6 grados de magnitud, que dejaron al menos 45 mil muertos en el sureste de Turquía y el norte de Siria.
Taner Savut, el director deportivo del Hatayspor, también quedó bajo los escombros de la residencia Ronesans, donde vivía Atsu, pero aún no se sabe nada de él.
Los expertos calculan que aún hay decenas de miles de cadáveres bajo los edificios derrumbados.
La Federación turca de futbol aprobó la retirada de las ligas de nueve equipos, incluido el Hatayspor (Superliga), que perdieron jugadores o sufrieron graves daños en los terremotos.
(Con información de EFE)