El árbitro se disculpó con el brasileño tras el partido, pues interpretó como una burla el gesto que tuvo el jugador al celebrar el 1-3 ante el Maccabi Haifa
Más allá del triunfo de anoche del PSG ante el Maccabi Haifa, la noticia fue el enfado de Neymar, que fue amonestado por un gesto -habitual, sin pretender burlarse de nadie- en la celebración del gol que cerró el choque. Tras el mismo, aún molesto por la situación, el brasileño habló en zona mixta y criticó la decisión del árbitro: “He hablado con él y me ha acabado pidiendo disculpas, pero estoy con una amarilla innecesaria y es una falta de respeto”, aseguró.
La protesta no acabó ahí: “Es muy triste. El fútbol se está volviendo aburrido, ya no se puede ni celebrar. ¿Qué tengo que hacer? ¿Avisar a la UEFA para que no me saquen tarjeta?”, dijo visiblemente contrariado el 10, que también utilizó sus redes sociales para repetir ese mensaje. Neymar simplemente se llevó las dos manos a la sien, un gesto que el árbitro interpretó como una mofa hacia el público.
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido…