El noreste de Estados Unidos recibe la mañana de este lunes una nueva tormenta invernal que ha entorpecido el tránsito, los aeropuertos, y causado el cierre de escuelas en varios estados.
Está en vigor una alerta de tormenta invernal para la ciudad de Nueva York, la parte baja del Valle del Hudson, el noreste de Nueva Jersey, y el suroeste y la región costera de Connecticut.
La tormenta arrojó varias pulgadas de nieve en el centro del país, y se prevén precipitaciones de entre cinco y ocho pulgadas en buena parte del noreste, con unas 10 pulgadas de nieve en Nueva Inglaterra.
La Administración Federal de Aviación reportó el domingo un promedio de dos horas de demoras en el Aeropuerto Internacional de Newark. En el Aeropuerto Internacional de Filadelfia los retrasos promediaban poco menos de una hora, reportó la agencia.
El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, declaró el estado de emergencia para los 21 condados, donde el Servicio Nacional de Meteorología pronostica entre cuatro y ocho pulgadas de nueve.
En Nueva York, el alcalde Bill de Blasio anunció el cierre de las escuelas para este lunes y se suspendió el programa de estacionamiento alternado para lunes y martes. Muchas otras escuelas del noreste del país han cancelado sus clases.
“Les recomendamos a todos los neoyorquinos que eviten traslados innecesarios y se mantengan lejos de los caminos. Si deben viajar, utilicen el transporte masivo”, dijo el comisionado para el manejo de emergencias de la ciudad de Nueva York, Joseph Esposito.
En Pensilvania, los meteorólogos advirtieron que los traslados “podrían ser muy complicados” debido a los pronósticos de hasta una pulgada de nieve por hora el domingo. Anticipan hasta siete pulgadas de nieve en partes de los condados de Lancaster y York, y entre tres y seis pulgadas en otras partes del centro y el noreste del estado. El oeste de la entidad también resultaría afectado.
El Departamento de Transporte de Pensilvania anunció restricciones a los vehículos comerciales.
En el extremo oeste de Kansas se registraron unas ocho pulgadas de nieve el domingo por la mañana. Pero la mayoría de las zonas de Kansas, Nebraska, Missouri e Illinois en el sendero de la tormenta no recibieron más de una pulgada.
Los meteorólogos advirtieron que la región podría resultar afectada por bajas temperaturas tras el paso de la tormenta, a medida que masas de aire del Ártico avanzan hacia el centro del país.
El Servicio Nacional de Meteorología indicó que el factor de enfriamiento podría provocar temperaturas de -20 Fahrenheit en el este de Nebraska este lunes por la mañana.