En la F1, en cada ciclo normativo se repite el mismo patrón. En el primer año siempre hay coches muy distintos, con cada equipo interpretando el reglamento y presentando conceptos diferentes. Pero a medida que pasa el tiempo, los equipos van analizando los elementos que funcionan de otros conjuntos para estudiar su posible implementación en su propio concepto de coche. Y así, los monoplazas se van pareciendo más y se van acercando más en pista. Ha pasado siempre y seguirá siendo así. No debe sorprender. Pero a Red Bull eso le ha molestado.
En la actual parrilla se puede ver claramente como la mayoría de equipos han apostado por usar un concepto de pontones (laterales del coche) igual a Red Bull, con un corte inferior y una caída posterior. Se aprecia por ejemplo en Alpine, Alfa Romeo, AlphaTauri o McLaren, por poner algunos ejemplos. Pero Red Bull solo se ha quejado de Aston Martin. Lo hacen porque en Bahrein el coche verde fue el segundo más rápido en pista, con un coche nuevo que mejoró en 2.4 segundos sus tiempos 2022. Algo insólito.
En la actual parrilla se puede ver claramente como la mayoría de equipos han apostado por usar un concepto de pontones (laterales del coche) igual a Red Bull, con un corte inferior y una caída posterior
La base de su queja no es otra que la fuga de cerebros que se produjo de Red Bull a Aston Martin. Los de verde quieren ser un equipo campeón y está uniendo todos los ingredientes para ello. Entre ellos, la contratación de ingenieros. Han fichado a decenas de mentes procedentes de los mejores equipos, como el gran ideólogo del actual coche, el ex jefe de aerodinámica de Red Bull, Dan Fallows, ex nº2 de Adrian Newey.
En ese sentido, Red Bull ha hecho algo similar, ya que ha fichado recientemente a decenas de ingenieros de motor de Mercedes para su nueva estructura de propulsores.
La base de su queja no es otra que la fuga de cerebros que se produjo de Red Bull a Aston Martin
Ese engranaje necesita tiempo para que dé sus frutos y surjan ideas propias innovadoras. Y de momento, el primer coche obra de Dan Fallows ha sorprendido con la adaptación de varios de los elementos que mejor funcionaron en otros coches del año pasado.
La queja
El asesor de Red Bull, Helmut Marko, no dudó en quejarse desde la primera carrera. “El Aston Martin es el más similar al Red Bull. Hay razones para que eso sea así. No es solo Dan Fallows quien pasó a Aston Martin, sino también otros empleados. Obviamente tienen buena memoria”, comentó. Y tras la carrera, ‘Checo’ Pérez fue más allá: “Es bonito ver tres Red Bull en el podio”. Marko dijo algo similar en ‘Servus TV’: “Hoy hemos tenido tres Red Bull en el podio, sólo que el último (en tercera posición) con un motor diferente”.
Similitudes, pero también muchas diferencias
La vista lateral deja claro que el concepto es parecido. Y Aston Martin es el único que tiene un brazo de suspensión curvado en lugar de recto. Pero de ahí a decir que los coches son iguales, va un trecho. De hecho, el concepto de la misma suspensión delantera es opuesto, con Red Bull apostando por la pull-rod y Aston Martin, con push-rod. Además, el Aston Martin tiene motor Mercedes, y por lo tanto usa la misma caja de cambios y suspensión trasera que los de la estrella. Eso sí, se desconoce cómo es el suelo, el elemento aerodinámico más importante.
Las quejas de Red Bull denotan nerviosismo. Son superiores, pero Aston Martin tiene un 37% más de horas de simulación por normativa para mejorar este año.
Viene de lejos
En 2021, los austríacos llevaron a los de verde a juicio por el fichaje de Dan Fallows porque le exigían cumplir una cuarentena, sin trabajar en Aston Martin a corto plazo. Finalmente, la cosa les salió rana y llegaron a un acuerdo para que empezara a trabajar en abril de 2022. Además, en el GP de España de 2022, Aston Martin presentó unos pontones iguales. Los de Milton Keynes se quejaron formalmente de plagio “ilegal” pero la FIA solo vio en ello una coincidencia. Marko estaba seguro de que se produjo una “descarga de archivos” y posterior trasvase que no pudo demostrar
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