“Seguiré hasta que el cuerpo aguante, estoy bien. Es un placer seguir jugando a fútbol”. Mikel Álvaro sigue desafiando a la edad -cumplirá 38 primaveras en el mes de diciembre- y acaba de renovar con el Amorebieta, donde encuentra “un ambiente increíble en el equipo”. Es un argumento muy convincente para asentarse en un lugar como Zornotza, porque lo de viajar por el mundo –Georgia, Nueva Zelanda y Azerbayán– para militar en otros clubes parece que ha pasado a mejor vida. Entre otras cosas, tener familia redimensiona la situación en busca de más sosiego. “Me encuentro bien y estoy disfrutando como un chaval”, reitera.
Para llegar a esta edad y con visos de prolongar más su idilio con el fútbol ha habido que cuidarse y verse alejado de la enfermería. En algún momento ha padecido lesiones graves, como una de ligamentos cruzados, pero ha espantando los males. “Me han respetado bastante las lesiones y eso hace mucho. También tienes que cuidarte si quieres seguir jugando a fútbol”, valora Álvaro.
Un equipo ilusionante
Como quiera que dispone de oportunidades como jugador azul, y viendo las perspectivas que se levantan con el proyecto que se está forjando para el siguiente curso, la ilusión no puede ser mayor. “La temporada pasada estábamos en una dinámica buenísima, ascendente, estábamos sextos. Es una pena que se parase. El club está mucho mejor, la directiva está haciendo un trabajo buenísimo, recortando la deuda. Con las limitaciones que conlleva tener que recortar una deuda. Viendo los fichajes que están haciendo para esta nueva temporada, está quedando un equipo muy bonito. Parece que la cosa pinta bastante bien”, se relame.
Viendo los fichajes que están haciendo para esta nueva temporada, está quedando un equipo muy bonito. Parece que la cosa pinta bastante bien
Entiende que en ese nuevo Amorebieta tiene cabida, se lo han transmitido, aunque habrá que trabajárselo mucho. “Si me dicen que no podría jugar, no renovaría”, apunta el centrocampista, seguro de sus posibilidades. “Me veo como para competir con cualquiera y con muchísima ilusión, pensando que cada partido que juegue puede ser el último. Estoy con muchísima ilusión de que empiece la temporada”, enfatiza. ¿Cuál será su rol? La cuestión tiene respuesta en el verde. “Será el papel que yo me gane. Si yo salgo, juego bien y demuestro, jugaré”, resuelve.
Acuerdo sencillo
El entrenador del Amorebieta no le ha transmitido precisamente cuál será ese rol, pero confía en disponer de minutos, ya que la dinámica que imprime amplía el abanico de efectivos. “El entrenador ya lo hizo bastante bien el año pasado, no aparta a nadie y todos jugamos. El que juega bien vuelve a tener oportunidades. Si salgo y juego y lo hago bien, jugaré. Lo importante es que la gente esté enchufada”, le ensalza.
Me veo como para competir con cualquiera y con muchísima ilusión, pensando que cada partido que juegue puede ser el último
Esa es la dinámica que ha imperado en la pasada campaña, en la que Álvaro pudo demostrar sus cualidades. Y de ahí que el Amorebieta deseara contar con los servicios del centrocampista. “Hablé con el director deportivo –Asier Goiria– y me comentó que contaban conmigo para la temporada que viene y fue una operación sencilla. No hubo prácticamente ningún tipo de negociación, fue todo muy sencillo”, explica.
“A empezar bien”
Lo que no va a ser nada sencillo es afrontar una nueva competición con formato restringido, con tanto grupo. “Este año con la Segunda División B Pro va a ser diferente. Hay que empezar bien. Está quedando un equipo muy bonito, pero luego hay que demostrarlo en el campo”, previene Álvaro, que asume que “lo de la pasada temporada es complicado de mejorar, hay varios equipos con más presupuesto”. Y para ello desde el 6 de agosto el Amorebieta comenzará a trabajar en la pretemporada para afrontar el arranque liguero el 27 de septiembre.
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