El buen ritmo al que avanza la campaña de inmunización frente al coronavirus, la mayor de la historia, ha logrado que más de la mitad de los españoles ya haya completado la pauta vacunal. El hito se ha producido en algún momento durante el fin de semana, según el informe publicado esta tarde por el Ministerio de Sanidad. En total, 24,04 millones de ciudadanos (el 50,7%) han recibido las dos dosis necesarias de las vacunas de Pfizer, Moderna y AstraZeneca o el único pinchazo que requiere la de Janssen.
La cifra de españoles que han recibido al menos un pinchazo asciende a 29,48 millones, el 62,1% de la población, y las dosis totales administradas superan los 51,2 millones.
El nuevo hito ha sido celebrado por los responsables sanitarios. Antoni Trilla, jefe de medicina preventiva del Hospital Clínic de Barcelona, destaca el buen trabajo realizado y “la muy buena aceptación que las vacunas tienen en España, algo que se hace más evidente si los datos se comparan con países de nuestro entorno”. “La campaña va bien, aunque es posible que a medida que crezcan los porcentajes de cobertura sea más difícil seguir avanzando a este ritmo. Los últimos kilómetros siempre cuestan más. Pero hay que seguir trabajando para vacunar al máximo número de población posible, porque es la única vía de proteger la vida de millones de personas y poner fin a la pandemia”, remacha Trilla.
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Quique Bassat, epidemiólogo e investigador ICREA del instituto ISGlobal (Barcelona), destaca tres etapas en la campaña de vacunación en marcha. Una primera en la que surgieron dudas sobre la seguridad de alguna vacuna. “Luego esto quedó atrás, el ritmo de vacunación cogió velocidad y se ha visto que la estrategia era buena y que se ha aplicado realmente bien”, detalla.
El problema, según Bassat, ha llegado con la variante delta: “Con ella hemos visto cómo incluso algunas personas con la pauta completa contraen la infección y que para alcanzar la inmunidad de grupo necesitaremos el 80% o incluso el 90% de la población vacunada, bastante por encima del 70% inicialmente previsto. Esto ha dejado en evidencia que la confianza en la vacunación ha llevado a retirar algunas medidas demasiado pronto”.
Pese al buen dato de vacunación a nivel nacional, las diferencias existentes entre comunidades autónomas son importantes. Las tres que van más avanzadas son Asturias (62,4%), Galicia (59,5%) y Castilla y León (57,6%). En la cola de la tabla destaca la posición de la Comunidad de Madrid (47,5%), que sistemáticamente exige más vacunas al Ministerio de Sanidad, pero que junto a Canarias (46,5%), Murcia (47,5%) y Baleares (47,6%) es la que menos dosis es capaz de administrar a su población.
El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha pedido este mismo lunes “un poco de paciencia” a los madrileños que están viendo cómo pasan los 21 días recomendados para recibir la segunda dosis de Pfizer y no son citados. Escudero, que ha recordado que pueden pasar hasta 28 días entre los dos pinchazos, ha atribuido el retraso al “actual entorno de escasez de vacunas”, aunque lo cierto es que Madrid tiene cerca de un millón de dosis guardadas en los almacenes a las que no está dando salida.
La buena marcha de la campaña contrasta con la delicada situación epidemiológica que vive España a causa de la explosión de contagios ocurridos en las últimas semanas, que comenzó entre la población más joven y aún no vacunada, pero que ya se ha extendido a los grupos de población de más edad, especialmente entre aquellos que aún no habían completado la pauta vacunal.
Cerca de un 100% de vacunados entre los más vulnerables
La inmunización ya está completada entre los mayores de 80 años (100%) y está cerca de conseguirse en el grupo de entre 70 y 79 años (97,6%). Falta un poco más entre los de 60 y 69 (81,2%), grupo al que se ha destinado la vacuna de AstraZeneca, que requiere de una mayor separación entre las dos dosis (inicialmente 12 semanas, aunque la mayoría de comunidades han acortado este plazo a ocho). La campaña también avanza a muy buen ritmo entre el siguiente grupo de edad, el de 50 a 59 años, cuya inmunización ya es del 85,5%. Son estas dos últimas franjas de edad las que más preocupan actualmente a los responsables sanitarios por el mayor riesgo que tienen de desarrollar cuadros clínicos graves de la covid.
La tendencia al alza de los porcentajes de vacunación, sin embargo, también se extiende a los más jóvenes. El 62,7% de los de 40 a 49 años ha completado la pauta, dato que asciende al 21% entre los de 30 a 39 años. La cobertura vacunal no supera el 20% por debajo de esa edad, pero la mayoría de comunidades ya están empezando a abrir las agendas para pinchar también a este grupo (a partir de los 16 años) y ayudar a contener la quinta ola de la pandemia.
España se sitúa así entre los países de la UE con mejores coberturas vacunales frente al coronavirus. El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC, en sus siglas en inglés) lanzó la pasada semana un aviso a una decena de países instándoles a impulsar la vacunación de sus mayores tras la ralentización observada en ellos del ritmo de vacunación. Según los datos del ECDC, que ofrece porcentajes mayores porque tienen en cuenta a la población mayor de 18 años (Sanidad hace sus cálculos sobre el total de los ciudadanos), solo cuatro países de la Unión Europea superan a España en la proporción de ciudadanos completamente vacunados. Son Malta (82%), Hungría (64,6%), Irlanda (60,8%), y Chipre (57,4%), frente al 55,9% alcanzado por las comunidades españolas.
Todos ellos tienen una población muy inferior a la española y, en el caso de Hungría, se trata del único país que ha utilizado, además de las cuatro vacunas autorizadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), otras cuatro procedentes de terceros países: CanSino y Sinopharm (China), Sputnik (Rusia) y Covishield (versión producida en la India de la vacuna AstraZeneca).
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