El Circuito de Jeddah es uno de los más peligrosos de toda la temporada de Fórmula 1. En carrera, se superan los 250 km/h ¡de media! en un trazado urbano entre muros. Una locura. Este año se alejaron algunas protecciones y se realizaron cambios para mejorar la visibilidad después de que en 2022 hubiera múltiples sustos de coches que iban a toda velocidad, en vuelta lanzada, que se encontraban por sorpresa en plena trazada a otros monoplazas que estaban preparando su giro, rodando lentos. Pero en este 2023, los sustos se repitieron y fueron varios pilotos los que los protagonizaron.
En los Libres 3 de este sábado, Lewis Hamilton tuvo que cambiar de dirección de forma repentina en pleno giro para no llevarse puesto a otro coche en un punto en el que ya le ocurrió a Stroll el viernes, en la entrada de una chicane.
Pero sin duda, el susto más gordo fue el que se llevó Fernando Alonso en los Libres 2 del viernes. El piloto ovetense iba a tope, acelerando en su intento de vuelta, cuando de repente se encontró a Carlos Sainz en medio de la pista. Fernando tuvo que frenar entre los muros de Jeddah para no chocarse contra la parte trasera del Ferrari a toda velocidad. Por suerte, el asturiano estuvo bien de reflejos y frenó justo a tiempo para evitar lo que hubiera podido ser un fuerte accidente.