Seguro que más de una vez te has preguntado por qué siempre ves la misma cara de la luna. Esto hace que muchas personas crean que la luna no gira sobre sí misma. Pero en realidad no es así. La luna también rota sobre su propio eje.
La luna gira sobre sí misma
Si algo seguro es que desde la Tierra nunca podremos ver la cara oculta de la luna. Pero esto no significa que el satélite no gire o que la cara oculta no reciba la luz del sol.
La razón por la que siempre vemos la misma cara de la luna es porque el satélite tarda exactamente lo mismo en girar sobre sí mismo que en dar una vuelta alrededor de la Tierra. Es decir, los movimientos de traslación y rotación están sincronizados.
La coincidencia entre ambos periodos recibe el nombre de rotación síncrona y se debe a la acción de la gravedad.
Si la luna no girara sobre sí misma o lo hiciera a diferente ritmo, mostraría de forma paulatina la totalidad de su superficie: la cara oculta y la cara visible. Cuando se formó la luna, giraba sobre su eje a mayor velocidad que ahora. La corteza del satélite baja y subía en función de si había marea baja o alta. Fue así como se generó una fricción que fue poco a poco frenando la velocidad de rotación del satélite.
La cara oculta de la luna
La cara oculta de la luna se vio por primera vez en el año 1959 gracias a la sonda soviética Luna 3, que la fotografió por primera vez en la historia. A día de hoy contamos con una selección muy amplia de imágenes en alta resolución de esta cara, la cual cuenta con más cráteres de impacto porque está más expuesta al impacto, y un menor número de mares.
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