La selección de Estados Unidos busca simplicidad de cara al Mundial 2023 de la FIBA. Steve Kerr, entrenador de un grupo con 12 debutantes en la escena internacional, quiere máximo compromiso, concentración y esfuerzo durante las seis semanas que durará la preparación y el torneo. “Cuánto más simple, mejor”, decía a los periodistas desplazados a Las Vegas para cubrir el devenir de un Team USA que llega a la cita con la mosca detrás de la oreja. En el recuerdo escuece todavía la séptima plaza de China 2019, el peor resultado de la historia en una Copa del Mundo.
“La idea es que estamos aquí para daros la mejor experiencia posible. Sabemos que todos vamos a jugar años en la NBA, pero son las experiencias como esta, el poder ganar, hacer vínculos con vuestros compañeros, sentir esos momentos dentro del vestuario… nada más importa, y de eso se trata aquí”, le dijo el técnico a los 12 elegidos por un staff de lujo que incluye a Erik Spoelstra, Ty Lue y Mark Few (Gonzaga University). “Esto es liberador, solo tenéis que jugar, competir. Nosotros os lo vamos a dar todo, y si vosotros nos dais lo mismo, esta será una experiencia increíble“, les arengó.
El grupo de jugadores que encarará el reto de volver a luchar por el oro y las medallas estará conformado por titulares indiscutibles en sus franquicias NBA, pero ninguna gran estrella contrastada de la liga: Paolo Banchero (Orlando Magic), Mikal Bridges (Brooklyn Nets), Jalen Brunson (New York Knicks), Anthony Edwards (Minnesota Timberwolves), Tyrese Haliburton (Indiana Pacers), Josh Hart (Knicks), Brandon Ingram (New Orleans Pelicans), Jaren Jackson Jr. (Memphis Grizzlies), Cameron Johnson (Brooklyn Nets), Walker Kessler (Utah Jazz), Bobby Portis (Milwaukee Bucks) and Austin Reaves (Los Angeles Lakers).
Además, solo Portis, con los Milwaukee Bucks en 2021, sabe lo que es ser campeón en la NBA. Otra historia es la enorme experiencia y palmarés del cuerpo técnico. “No vamos a usar la palabra complejo en el baloncesto estadounidense, simplemente debido a la naturaleza del asunto”, apuntó Kerr. “Seis semanas, y toda la experiencia que tengo entrenando al Team USA… hay que mirar hacia adelante usando lo bueno y lo malo, entendiendo cómo ser más eficientes, el calendario y lo pronto que arranca el torneo“.
El Team USA entrenará cuatro jornadas en Las Vegas y luego jugará su primer amistoso contra Puerto Rico en la ciudad de Nevada, el lunes por la noche. Después viajará a Málaga para continuar con su agenda de amistosos y posteriormente disputará un triangular en Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos, como última oportunidad para preparar el asalto a la Copa del Mundo, que arrancará para ellos el sábado 26 de agosto en Manila, Filipinas, con un partido contra Nueva Zelanda.