Con la actual temporada ya finiquitada y la salvación en el bolsillo gracias a la decisión adoptada por la RFEF de anular los descensos, el Real Unión ya se encuentra inmerso en la planificación de la próxima temporada, una toma de decisiones que no solo afecta a la composición de la plantilla sino que también implica al director de orquesta. Porque en este proceso urge encontrar al técnico que coja las riendas del equipo a partir de ahora, relevando a un Gorka
Etxeberria que se hizo con el cargo de manera interina tras el cese de Alberto Iturralde hace unos meses y debe volver sin más dilación a sus quehaceres en la dirección del fútbol txuribeltz.
En este sentido, el donostiarra ya ha empezado a sondear el mercado en busca de la persona idónea que encaje en el perfil que persigue para el banquillo irundarra. “No nos va a encajar ni un modelo demasiado defensivo ni uno que especula demasiado con balón. Me identifico con un juego combinado y moderno que vaya hacia delante”, declaró en su día el responsable del fútbol en el Real Unión. La idea siempre la ha tenido clara y faltaba por ver quién se ajustaba a esos parámetros. Así, Etxeberria ha ido estrechando el círculo hasta el punto de que ya aparecen los primeros dos nombres sobre la mesa: Roberto
Aguirre y Jabi
Luaces, entrenadores que conoce al dedillo y con los que ha trabajado recientemente en el Unionistas de Salamanca.
Roberto
Aguirre (Langreo, 1968) llegó a la ciudad charra de la mano de Gorka
Etxeberria en verano de 2018 tras haberse labrado una carrera en el Lealtad, el Mensajero y sobre todo el Zamora, donde estuvo tres temporadas y media. En su currículum figuran más de 20 años en los banquillos desde que empezó en las categorías inferiores del Rayo Majadahonda y su periplo abarca banquillos de Canarias, Baleares o Murcia. Ya conoce el Grupo 2 de Segunda B porque dirigió al Lealtad durante la temporada 2017/18, en la que no pudo evitar el descenso a Tercera. Por lo tanto, el Real Unión no le resulta desconocido.
Una opción más complicada
Otro de los candidatos que más fuerte está sonando en los últimos tiempos es Jabi
Luaces (Busturia, 1973), a quien Etxeberria fichó para dirigir Unionistas y sustituir a Aguirre el pasado mes de octubre, cuando tuvo que despedir al asturiano por los malos resultados. El técnico vizcaíno, a quien la entidad salmantina pretende renovar y ya se lo habría comunicado, es muy del gusto del director de fútbol del Real Unión y es, a su vez, un viejo conocido del fútbol vasco, un tipo con carácter.
‘Bustu’, como se le conoce, dirigió antes de Unionistas al Arenas en la 18/19. Sus mayores logros los ha firmado con el Gernika, club al que está muy vinculado, ya que logró un ascenso a Segunda B en Urbieta y casi logra meterse en el playoff para subir a Segunda en los cinco años que dirigió al conjunto vizcaíno. El proceso para firmar al nuevo entrenador del Real Unión ya ha comenzado.
En los últimos días no han dejado de salir nombres de candidatos para dirigir al Real Unión la temporada que viene y coger el relevo de Juan Domínguez y Alberto Iturralde, los dos últimos inquilinos del banquillo del Stadium Gal. Así, a las opciones de Aguirre y Luaces también se ha sumado un tercer nombre, el de Ander
Avellaneda, técnico que ha dirigido al Tolosa durante las últimas tres temporadas y con el que los urdiñas han logrado retornar a Tercera y disputar una histórica eliminatoria de Copa del Rey contra el Valladolid.
Sin embargo, a día de hoy no hay conversaciones abiertas ni un interés manifiesto del Real Unión por Avellaneda, quien estaría encantado de coger el timón txuribeltz pero no ha recibido ninguna llamada ni mensaje de la entidad irundarra.
Con la crisis sanitaria todavía latente, parece demasiado pronto para atar los cabos que siguen pendientes en el fútbol, habida cuenta de que la opción de disputar los playoffs de ascenso a Segunda y Segunda B sigue activada.
En las próximas semanas se acelerarán las conversaciones y negociaciones y llegará la hora de los anuncios oficiales.
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