LONDRES – El exdirector del FBI, James Comey, alertó este domingo de que Estados Unidos afronta días “peligrosos” ante la salida del poder del actual presidente, el republicano Donald Trump, a quien comparó con un “capo mafioso”.
“Nunca he visto a un adulto con mayor necesidad de reafirmación que Donald Trump. Solo lo he visto en niños de dos o tres años”, afirmó Comey en una entrevista con el canal británico Sky News que como NBC News y Telemundo, es propiedad de Comcast Corp.
“La reafirmación es como el aire (para él). La necesita constantemente y eso es lo que hace es que los próximos siete días sean tan peligrosos en Estados Unidos, porque él siente que la reafirmación se le está escurriendo de los dedos y sin duda se siente traicionado por quienes le rodean”, agregó.
En la entrevista, Comey opinó que Trump debe ser condenado por el Senado pero no enjuiciado penalmente por incitar la violencia en el Capitolio. “El país estaría mejor si no le diéramos la plataforma que ofrecería una acusación durante los próximos tres años”, dijo.
“Me gustaría ver que algunas de las luces se apagan y él puede pararse en el jardín delantero de Mar-a-Lago y gritar a los autos en su bata de baño y ninguno de nosotros lo escuchará”, agregó.
Antes de la investidura del demócrata Jon Biden el próximo miércoles como presidente de EEUU, el antiguo director del FBI, despedido por Trump en 2017, aseguró que el republicano es “un demagogo populista capaz de decir cualquier cosa en cualquier momento para tratar de ganarse el apoyo de la gente”.
“Hay un aspecto que la gente no suele ver. Hay algo de amenazador en él que se siente en privado, pero no en público. Lo he notado cuando he estado sentado cerca de él. Constantemente me recordaba a un capo mafioso, porque he conocido a muchos capos de la mafia y he ayudado a meterles en la cárcel”, dijo Comey.
Cuestionado sobre la posibilidad de que se produzcan nuevos disturbios en los próximos días o semanas, aseguró estar “preocupado” a ese respecto.
“Hay personas armadas y perturbadas que creen que su país les está siendo arrebatado, y eso constituye una amenaza que las autoridades de Estados Unidos deben tomarse muy en serio”, recalcó.