No está cómodo. Y en plazas tan difíciles como Miami, se nota aún más. Sainz ya dijo en Imola que seguía sin hacer lo que quería con el coche, que aún no había el Ferrari F1-75 a su terreno. Esa es su principal prioridad en este arranque del curso. Le está costando y mucho con un monoplaza que sí se adapta a las mil maravillas al pilotaje de Leclerc. Y Carlos lo sigue intentando. Para ello necesita rodar como una peonza. Por eso le dolieron tanto sus abandonos en el primer giro de Australia y Emilia Romagna. No le escocieron los puntos, sí los 600 kilómetros que había perdido para seguir adaptándose. Así, encaraba un reto enorme en Miami. En un circuito muy difícil en el que los pilotos sufrieron mucho más que en cualquier otra pista nueva para ir rápido, Carlos lo tenía aún más difícil al pilotar un monoplaza en el que no puede ser él mismo. Si no vas cómodo, en otro tipo de pistas puedes salvarlo. No aquí. En trazados tan delicados y difíciles como Miami lo pagas, ya que no puedes empujar porque no tienes confianza. Y si lo haces, estás más cerca de los errores. Carlos estaba intentando apretar en los Libres 2. Era el mejor sobre la pista con el mejor crono. Pero ahí, cuando estaba buscando sus límites, se fue contra el muro.
Carlos ha destacado en muchas cosas en la F1, pero sobre todo, por su constancia y la ausencia de los fallos. Con este coche, en las últimas tres carreras suma tres. El error de Australia en el primer giro. El de Imola en ‘qualy’ y este en la FP2 de Miami. En una pista así, era todavía peor noticia, ya que su coche impactaba contra uno de los muros de protección cuando faltaban 40 minutos de sesión. Perdía así muchos giros para seguir ganando una confianza que ahora deberá recuperar en los Libres 3 antes de la ‘qualy’ de este sábado (22.00 H/DAZN F1).
Pero tras un fallo, Carlos siempre se ha levantado. Lo demostró ante los ‘tifosi’ en Imola con su remontada en la ‘Sprint Race’ del sábado, pasando del 10º al 4º en menos de 21 giros. Puede volver a demostrar su fuerza mental con otra buena ‘qualy’ este sábado. El choque no fue relevante. Este sábado saldrá de nuevo el sol para él, aunque pueda ser solo de forma metafórica, ya que porque podría llover en Miami en una ‘qualy’ que se antoja apasionante por las dificultades del circuito.
En esta pista con zonas tan rápidas y a la vez una zona tan lenta y ratonera (de la curva 11 a la 16), los equipos sufrieron para encontrar el balance adecuado. Además, el asfalto estuvo muy verde y el trazado no deja espacio para los errores. La ‘qualy’ puede estar muy movida y se esperan muchas interrupciones, más leña al fuego en la lucha por la pole.
Verstappen, con problemas y lidera Russell; Alonso es 5º
La primera posición se la llevó George Russell, de nuevo dejando mejores sensaciones que su compañero, el 7 veces campeón Lewis Hamilton. El joven de 24 años, con un Mercedes que mejoró su rebote, superó en 0″106 a Leclerc, en 0″212 a Pérez y en 0″241 a Hamilton, con Fernando Alonso en la quinta plaza a 0″434.
La FP2 estuvo llena de interrupciones, por el choque de Sainz, un problema de Verstappen o un contratiempo en el Williams de Latifi. Ello impidió que los coches completaran los programas previstos y rodaran lo que deseaban. Por eso, se desconoce si el resultado que reflejó la clasificación es del todo representativo.
Sí parece clara la mejora de Mercedes con las mejoras llevadas a Miami. Pero surgen otras dudas. Leclerc dijo que el motor de su Ferrari hacía ruidos extraños en las curvas 14 y 15. Y sobre todo, Verstappen solo pudo dar una vuelta en los Libres 2 por un problema de fiabilidad en su Red Bull.
El piloto neerlandés no pudo rodar mucho en los primeros entrenamientos, y entre sesión y sesión, en su box trabajaron ad estajo para arreglar algún contratiempo. Pero al salir a pista, se incendió la rueda trasera derecha del RB18 por un posible problema hidráulico. Max deberá recuperar el tiempo perdido en los Libres 3 y encarar la clasificación con menos giros acumulados en una pista tan delicada. Y encima, la lluvia podría aparecer.
En la quinta posición terminó Fernando Alonso con un Alpine que mostró un enorme paso al frente de los Libres 1 a los Libres 2, síntoma de que el trabajo de la primera sesión no estuvo enfocado en el rendimiento real del coche y sí en otras pruebas. Fernando espera que su mala suerte termine en Miami y se mostraba confiado. Quiere un buen resultado.