Llega el momento de recordar a todos los que se han marchado a lo largo del 2020. Las pérdidas no son nunca fáciles de asimilar, pero este año ha sido especialmente duro por la presencia de la Covid-19, que se ha llevado a millones de personas de todo el mundo y ha agravado las enfermedades de muchas personas. No ha sido fácil decir adiós, pero todos aquellos que han fallecido han dejado tras de sí un gran legado que merece la pena recordar, manteniendo así su memoria viva.
La infanta Pilar, la hermana mayor del rey Juan Carlos, vestía al mundo royal de luto el pasado 8 de enero de 2020. Tras padecer un cáncer de colon que ella misma confirmó en mayo del año anterior, la infanta fallecía en un hospital madrileño. Sin ser un funeral de estado, el suyo fue un adiós bonito que reunió a sus seres más queridos y, por supuesto, a los reyes Felipe y Letizia, muy afectados por su pérdida.
El mundo contenía la respiración el pasado 26 de enero de 2020 cuando llegaban las primeras informaciones de un accidente de helicóptero en el que viajaría el jugador de baloncesto Kobe Bryant. Solo hicieron falta unas horas para conocer el terrible desenlace y es que en el accidente no solo perdía la vida el de los Lakers, sino también su hija mayor, Gianna, y otras siete personas.
La del deportista fue solo la primera de las muertes que dejaron a más de uno con la boca abierta, pues ha sido un año especialmente malo. Todos ellos merecen ser recordados, pero si hay alguien que ha dejado un vacío aún más hondo ha sido Álex Lequio. El hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio fallecía el 13 de mayo en Barcelona, tras dos años luchando contra el cáncer y sin dejar de dar lecciones de vida. A pesar de su corta edad, solo tenía 27 años, ya se había hecho un hueco en el mundo de los negocios y, lo más importante, se convirtió en un ejemplo a seguir. Si hay algo que cabe la pena recordar de Álex fue su entereza, positivismo y humildad hasta el final.
Unas lecciones de vida que compartía el músico Pau Donés. El cantante y líder de ‘Jarabe de Palo’ fallecía el 9 de junio, tras padecer durante varios años un cáncer de colón que no le consiguió quitar la vitalidad y las ganas de vivir. El mejor legado son, además de su hija, sus canciones, con las que consiguió transmitir una filosofía de vida a la que merece la pena prestarle atención. «Sean felices, la vida es urgente, la vida es una y ahora, y hay que vivirla a tope», dijo en una ocasión, cuando anunciaba a sus fans que le grupo se tomaba un respiro, resumiendo a la perfección una forma de pensar contagiosa.
Aunque muy tristes y dolorosas, no son las únicas muertes que han sucedido a lo largo de este 2020. Recordamos sus nombres.