Pérez supera a Verstappen en el Mundial. Russell, a Hamilton. Ocon a Alonso. ¿Son ‘Checo’, George y Esteban mejores que sus líderes? Hacerse esta pregunta por el resultado de las primeras tres carreras de la temporada no tiene sentido. Hay que analizar las circunstancias que ha vivido cada piloto. Sin ir más lejos, Verstappen ha estado golpeado por la fiabilidad, con dos abandonos en tres carreras sin los que estaría pisándole los talones a Leclerc. En este sentido, lo mismo sirve para hablar de Ferrari. Charles Leclerc lidera el Mundial con un inicio de año sensacional, sin errores y pilotando como los ángeles un coche al que se adaptado a la perfección desde el inicio. El monegasco ganó en Bahrein y Australia y minimizó pérdidas en Jeddah, siendo segundo ante un Verstappen superior. Por su contra, Carlos Sainz ha sufrido más para adaptar su estilo de pilotaje al coche rojo y también ha sufrido más problemas mecánicos y circunstancias adversas, como en el caso de Australia.
Consciente de ello, Mattia Binotto no dudaba en defender al español tras la carrera australiana ante las odiosas comparaciones entre los resultados de sus dos pilotos, mostrándose seguro y convencido de que el español podrá alcanzar el nivel de Leclerc y batallar con el monegasco, lucha para la que reiteró que no habrá órdenes de equipo.
“Necesitamos ser perfectos. Carlos sufrió circunstancias que no le ayudaron. Podría salir entre los cuatro primeros, así que su carrera ya estaba cuesta arriba. Lo que le pasó en clasificación no es algo que ayude psicológicamente y después llegó el error de la carrera, pero lo conozco, aprenderá de todo y saldrá de esta más fuerte. En Imola sabrá redimirse”, apuntó Binotto. Tiene claro que Carlos Sainz fue muy rápido durante todo el fin de semana y que su rendimiento final estuvo comprometido por lo ocurrido en clasificación y por un problema en el volante antes de la carrera.
“En Imola sabrá redimirse”
En los libres se había mostrado veloz desde el inicio. tanto es así que Marc Gené, dentro de Ferrari, dijo que este fin de semana era Leclerc el que estaba consultando los datos del madrileño para mejorar.
Carlos podía haber estado arriba en la parrilla, como demostraron sus dos primeros sectores de su primera vuelta de Q3, invalidada por la bandera roja que salió justo antes de que cruzara la meta. Aquello le dejó sin un primer crono y antes del último intento de Q3 su coche no arrancó por un contratiempo de última hora. No pudo calentar gomas y terminó siendo 9º. Antes de la carrera, le cambiaron el volante por un fallo y no funcionó bien en la salida. Eso hizo que Carlos perdiera su calma y atacara a la desesperada para remontar, cometiendo un error que le dejó fuera en la vuelta 2. A Carlos le pasó todo lo negativo que le podía suceder. Mientras, para Leclerc fue un fin de semana perfecto. Mattia lo sabe y quiso destacarlo.
“Carlos quiere demostrar que está a la par con Leclerc. Las circunstancias este fin de semana no le han ayudado, pero estoy convencido de que veremos a un Carlos que sabrá medirse a Charles”, agregó con contundencia, mostrando su total confianza respecto al madrileño.
“Estoy convencido de que veremos a un Carlos que sabrá medirse a Charles”
Libertad entre Sainz y Leclerc
Por todo lo explicado, Mattia Binotto, al ser preguntado en rueda de prensa por si Sainz y Leclerc seguían teniendo libertad para pelear entre ellos si se encuentran en pista, el italiano reiteró que no piensa dar órdenes de equipo.
“¿Libertad? ¡Claro! Han pasado 3 carreras y aún quedan 20 más, espero, 19 o 20… Así que el campeonato todavía es largo y los dos pilotos son libres para pelear. Y realmente así lo esperamos y disfrutaremos de sus batallas”, añadió Mattia tras la cita de Melbourne, precisamente cuando sus dos pilotos se sentaban a su lado para responder a las preguntas de la prensa.
Sainz abandonó en Australia
Mekies también defiende a Sainz
Un día antes, tras los problemas que lastraron a Carlos Sainz en la clasificación, el director deportivo de Ferrari, Laurent Mekies, ya defendió a Carlos Sainz en declaraciones a ‘DAZN F1’.
“Tuvimos un problema. No conseguimos arrancar el coche cuando queríamos. Al final pudimos hacerlo, pero ese retraso supuso no poder hacer esa vuelta de calentamiento, que era nuestra secuencia. Se ha visto como ha habido gente que empujaba desde el principio, otros que hacían vuelta de preparación, y para él no era ideal empezar esa última tanda con una secuencia distinta a lo que hemos estado haciendo durante todo el fin de semana. Si le añadimos la bandera roja por un segundo o medio segundo en su primer intento… es una pena. Pero ha mostrado una buena velocidad, así que seguro que mañana intentaremos luchar”, apuntaba Mekies el sábado, antes de una carrera que volvería a ser una pesadilla.
Sainz, pese a ello, quiere sacar lo positivo de todo, que este fin de semana ha dado otro paso más en su adaptación al Ferrari. El español espera poder ir cómodo al 100% con el coche en breve. Será ahí cuando se puedan hacer las tan famosas comparaciones.
Sainz abandonó en Australia en la vuelta 2