“Red Bull es austriaco, pero tiene su sede en Inglaterra, así que lo veo como dos victorias en casa Red Bull”, aseguraba tras el GP de Austria de F1 el jefe de Ferrari, Mattia Binotto, feliz por el triunfo de Charles Leclerc, merecido tras 5 carreras en las que los fallos de fiabilidad o del muro le habían dejado sin victoria. Pero a su vez, “triste por Sainz”, por el incendio de su coche y un doblete perdido para Ferrari. Todo ello, en conjunto, demuestra dos cosas claras: El Ferrari es rápido y ha podido ganar a Red Bull en dos pistas muy distintas. Especialmente significativa es la victoria en Austria, más en casa de Red Bull que en Silverstone y en una pista en la que hace solo unos meses los de Milton Keynes hubieran ganado por potencia. Ganó Ferrari, con solvencia, con una gran gestión de las gomas. Pero al lado contrario de la balanza está la fiabilidad. Ferrari sabe que debe mejorar ese aspecto para aspirar a la corona. Pero Mattia cree en ello. Solo le “preocupa” la fiabilidad de las próximas carreras, pero “no a medio-largo plazo”.
Por eso, Mattia Binotto lanzó un discurso lleno de esperanza en su rueda de prensa posterior al GP de Austria, asegurando que no solo hay que apuntar al título de pilotos y que lograrlo todavía es posible, ya que Leclerc está a 38 puntos de Verstappen, sino que la remontada también es posible en el Mundial de Constructores, donde Red Bull le saca a los de Maranello 56 puntos en el ecuador del curso.
“Estamos hablando del Mundial, pero me gustaría hablar de ‘los Mundiales’ (de pilotos y constructores). No sé por qué siempre nos enfocamos en uno solo. Todavía creemos en ello”, apuntó Binotto, destacando la importancia de que su coche haya ganado en pistas tan distintas como Silverstone o Spielberg.
“Este es un coche que hoy, en Silverstone y en carreras anteriores, ha demostrado que puede ser competitivo y que siempre puede luchar por la victoria. En Mónaco y España Charles tenía una ventaja significativa en carrera. Red Bull trajo sus desarrollos a Inglaterra, y nosotros llevamos algo y yo diría que el balance de rendimiento general de los dos coches se ha mantenido sin cambios: unas décimas a favor de uno u otro dependiendo de la pista. Es obvio que no nos rendimos, no es nuestra actitud rendirnos, con todas las carreras que quedan”.
Eso sí, en el discurso de Binotto faltó decir que en Silverstone Verstappen tenía un ritmo demoledor y podría haber ganado a placer si su coche no se hubiera visto dañado por una pieza que soltó el monoplaza de Tsunoda.
“Esta victoria es tan importante como la anterior. Ya teníamos un Ferrari ganador en Silverstone y ahora solo los pilotos han cambiado. Esta es una victoria que cuenta mucho para Charles, sin duda, porque en las últimas carreras había tenido la oportunidad de ganar sin conseguirlo, por una u otra razón. Era importante para él traer este resultado a casa. Estoy muy feliz por él, así como de igual manera estoy triste por Carlos. Estaba haciendo una gran carrera y ya parecía que podíamos tener un doblete, como en Inglaterra, que esta vez no nos llevamos a casa por cuestiones de fiabilidad”, continuó Mattia.
Estoy muy feliz por él, así como de igual manera estoy triste por Carlos.
LA FIABILIDAD
“¿Cuanto me preocupa la fiabilidad? Me preocupa de cara a las próximas carreras de esta temporada, pero no me preocupa mirando al medio-largo plazo”, aseguró.
“Como equipo, estoy seguro de que tendremos la capacidad de resolver estos problemas. Conozco a los ingenieros de Maranello. Sin embargo, poder contar con un motor de gran rendimiento en el que sabemos que estamos trabajando para arreglar la fiabilidad, hace que sea optimista sobre el futuro”, apuntaba el ingeniero de origen suizo tras otro contratiempo de motor, en este caso de Sainz. Es decir, reitera la idea que ya lanzó hace meses: prefiere tener un coche rápido que fiable y trabajar sobre esa base.
“Hay que intervenir, pero los tiempos suelen ser bastante largos. Es necesario diseñar nuevos componentes, luego producirlos y aprobarlos para garantizar su fiabilidad. Para encontrar una solución definitiva, los tiempos suelen ser superiores a unas pocas semanas. Lo que se puede hacer a corto plazo es tratar de gestionarlo en términos de kilometraje y uso sin limitar el rendimiento. Después de este fin de semana intentaremos entender mejor de qué se trata, porque de momento no tenemos garantías, solo puedo especular”, añadió como posible solución a corto plazo para que el problema de Carlos no se repita en las próximas citas en ninguno de sus dos coches.
El progreso de Ferrari
Binotto quiso exaltar el trabajo realizado por el equipo en general, y en concreto, el esfuerzo y atino de la fábrica de Maranello, desde la primera proyección del coche, hasta la actualidad. Y es que al margen de tener un coche rápido desde el inicio, Mattia remarcó lo importante que era que las nuevas piezas llevadas a pista durante el curso hayan supuesto siempre uun progreso. En ese sentido, reconoció que ahora mismo la fortaleza de Red Bull respecto a Ferrari sigue siendo su mayor eficacia en el DRS, aunque menor que hace algunas carreras.
“Teníamos una desventaja en relación a Red Bull en términos de velocidad punta, principalmente por la ganancia que tienen ellos con el DRS abierto. Trabajamos duramente en ello e introdujimos el nuevo alerón trasero en Canadá que redujo esta diferencia de velocidad. Creo que todavía tienen una ligera ventaja, pero muy pequeña y casi inapreciable”, apuntó.
“En las zonas de potencia estamos muy cerca, por lo que la lucha se juega principalmente en los sectores de agarre limitado, en las curvas, donde podemos marcar la diferencia. Pero creo que hoy hemos sido rápidos no solo por el coche, sino también gracias a los pilotos que han hecho un trabajo extraordinario de puesta a punto y equilibrio durante todo el fin de semana, así como en la gestión de neumáticos y conducción”, explicó.
“Se están estudiando los desarrollos para optimizar el paquete en todas sus áreas”, continuó Binotto.
“El alerón es una optimización, al igual que la búsqueda de la carga vertical, la puesta a punto, el equilibrio, la gestión de los neumáticos… El resultado final es la capacidad de poner todo junto. Vimos que Haas tuvo un gran fin de semana sin llevar ninguna mejora, porque pudieron aprovechar al máximo su coche en una pista determinada. Así que es cierto que compensamos parte del retraso de velocidad que tuvimos con Red Bull al comienzo de la temporada. Fue importante para nosotros, pero el rendimiento general debe verse como la suma de todo”, matizó el ingeniero, apuntando también al progreso realizado por todo el equipo.
“El coche sigue creciendo, pero no solo eso, también el equipo, los pilotos… en Austria las paradas en boxes también han ido bien. Luego están las mejoras que traemos, incluido el último paquete en Inglaterra. Para mí la mejor noticia es que cuando traemos algo, funciona. Trajimos una nueva carrocería que le dio sus ventajas, así como un nuevo alerón trasero que tenía que eliminar la desventaja de velocidad que teníamos en comparación con Red Bull. Lo vimos en carrera, ya no teníamos esa desventaja. La buena noticia es que las mejoras que traemos están funcionando y es un equipo que sigue enfocado y agresivo”, finalizó.