Así lo informó el gobernador Javier Corral, quien aseguró que su administración no dejará ni una línea de investigación pendiente por revisar.
A 10 años del homicidio de Marisela Escobedo Ortiz, madre que se convirtió en activista social para reclamar justicia por el homicidio de su hija Rubí, su investigación será retomada por la Fiscalía General de Chihuahua, para profundizar en las líneas de investigación que algunos familiares han señalado.
Así lo informó el gobernador Javier Corral, durante la transmisión del programa Chihuahua Seguro, y aseguró que su administración buscará cerrar el caso.
“Para que nos demos todos la oportunidad realmente de cerrar el caso con justicia completa, que no quede nada pendiente en términos de alguna línea de investigación por parte de familiares o por quienes estuvieron llevando la defensa y el caso de Marisela”, sostuvo el mandatario, acompañado del fiscal general del Estado, César Augusto Peniche Espejel.
Por su parte, Peniche calificó el caso como “controvertido”, por una serie de “cuestiones adyacentes”: primero que nada la muerte de su hija Rubí, la persecución y detención del homicida Sergio Barraza; la decisión muy polémica del Tribunal que llevó a cabo el enjuiciamiento; la liberación del mismo y la búsqueda constante de Marisela para dar con el paradero de este sujeto, que finalmente fue hasta Zacatecas.
Explicó que hubo dos personas sentenciadas, una que se le conoció como “El Wicked”, quien falleció en la cárcel y otro más que se le conoce con el apelativo de “El Gordo”, quien está en un reclusorio del estado de Chihuahua, y el autor de todo esto que fue Sergio Barraza, quien cayera abatido en un enfrentamiento en Zacatecas.
“Estamos recibiendo la petición formal de algunos colectivos como el Centro de Defensa de los Derechos Humanos de las Mujeres (Cedehm) y vamos a atender esa petición, vamos a retomar la investigación, vamos a profundizar para que todos quedemos ciertos de que en el caso de Marisela Escobedo no exista impunidad”, sostuvo el fiscal.