‘Sabemos que muchos negocios todavía tienen algunos materiales en sus bodegas, que se los acaben y ya no adquieran más’, indicó la diputada local Julieta Mejía.
Por Karina Cancino
Este 1 de enero entró en vigor la llamada Ley Nayarit sin Plásticos, para que comerciantes y prestadores de servicios dejen ofrecer bolsas de plástico, popotes o envases de unicel a sus clientes; sin embargo, ante la existencia de estos productos en las bodegas, habrá flexibilidad durante el mes de enero, afirmó la diputada local Julieta Mejía.
“Hay flexibilidad por el tema de la pandemia, sabemos que muchos negocios todavía tienen algunos materiales en sus bodegas, (que se) los acaben y ya no adquieran más; no se quiere afectar a la economía de los pequeños comercios; y será todo el mes de enero la otra prórroga para ir supervisando los negocios”, afirmó la legisladora que junto con el Ejecutivo estatal impulsó estas disposiciones.
La legisladora consideró que durante estos nueve meses en los que ha transcurrido la pandemia por Covid-19 en Nayarit, incrementó el uso de plásticos debido al confinamiento que realizan algunas personas, por lo que se insistirá que ante esta necesidad, se utilicen materiales biodegradables o compostables.
“Hemos firmado convenios, incluso antes de que fuera ley, con empresarios, hoteleros y restauranteros, principalmente de Bahía de Banderas, que renunciaron a estos productos y ahora estamos esperando que con la entrada en vigor de una ley similar en la Ciudad de México, baje el costo de esos productos“, mención Mejía.
Reconoció que a pesar de que la ley prohíba el uso de plásticos y se pretenda migrar hacia otros materiales, no existe un planteamiento para el desecho adecuado de estos productos menos dañinos que terminarán de todos modos, en los rellenos sanitarios de los 20 municipios.
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“Estos materiales biodegradables o compostables son menos dañinos al ambiente que los de un solo uso como el unicel, pero aún no hay esta forma de separarlos y estamos trabajando ley de residuos sólidos ya que todo llega de la misma forma a los tiraderos o rellenos sanitarios, pero de alguna manera ayudan porque se degradan fácilmente”, estimó.
Mientras tanto, la Secretaría de Desarrollo Sustentable de Nayarit trabaja en el establecimiento de estrategias para echar a andar la ley; y la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa), trabaja en la definición de multas o sanciones, que dependerán de la gravedad de la infracción, del giro comercial y otras características.
El Artículo 253 de la Ley Estatal de Equilibrio Ecológico y Protección al Medio Ambiente, considera algunas sanciones administrativas o multas que van de 20 a 50 mil veces la UMA, suspensión de permisos, arrestos administrativos por 36 horas y demás, que podrían ser la base para las penalizaciones.
En junio de 2019 fue cuando se reformó la Ley Estatal de Equilibrio Ecológico y Protección al Medio Ambiente para eliminar el uso de bolsas, popotes de plástico y productos de unicel deben ser cambiados por biodegradables; en ese entonces iniciaron supermercados y otros giros, pero con la llegada de la pandemia, se prorrogó su aplicación hasta 18 meses después de su aprobación.